La cadena humana de apoyos políticos suma eslabones y los engranajes de la maquinaria comienzan a girar. El lehendakari Urkullu ha exhibido este miércoles el respaldo del primer ministro de Gales, Mark Drakeford, otro de los territorios del eje atlántico que se resiste a perder influencia en Europa y que lo ha visitado en Ajuria Enea para lanzar una imagen de sintonía y cooperación. Esta fotografía llega tras la cumbre que organizó el lehendakari en Ajuria Enea con los presidentes de Galicia, Asturias y Cantabria, y tras reunirse con los mandatarios de Nueva Aquitania y Nafarroa, quienes coincidieron en exigir la creación de una macrorregión atlántica para dar un barniz más institucional a la colaboración entre estos territorios y optimizar sus Presupuestos. Los aliados del 'lobby' atlántico crecen. Esta vez se ha exhibido el respaldo de Gales, que ha ratificado su compromiso con la macrorregión.

El pistoletazo de salida está muy cerca. Cardiff va a acoger los días 23 y 24 de mayo una Asamblea General de la Comisión del Arco Atlántico que se espera que sea decisiva para dar un impulso definitivo a la macrorregión. Llega en puertas de que Pedro Sánchez asuma la presidencia de turno del Consejo de la Unión Europea el 1 de julio. Es el Consejo de la Unión, que estará presidido por el presidente español durante un semestre, el que debe proponer la creación de la macrorregión y elevar un mandato a la Comisión Europea. El lehendakari aspira a que se pueda consensuar un emplazamiento explícito al presidente español para activar el procedimiento.

Urkullu y Drakeford han mantenido un encuentro en Ajuria Enea, aunque un imprevisto en las conexiones de los vuelos del primer ministro galés ha retrasado la cita hasta las 13.00 horas y, al achicar los huecos de la agenda, ha impedido la comparecencia conjunta que estaba prevista. Lehendakaritza ha resumido los asuntos tratados en la cita a través de una nota de prensa. Todos estos movimientos, liderados por Urkullu como presidente de turno de la Comisión del Arco Atlántico, llegan en un momento de preocupación ante el riesgo de perder influencia y de que el eje europeo se desplace hacia el este, por tres motivos: la próxima incorporación de nuevos países a la Unión Europea tras la guerra en Ucrania, la salida del Reino Unido del club que ha supuesto perder un socio muy potente para este lobby, y la cerrazón francesa a potenciar las conexiones con el sur. Gales apoyó el Brexit, pero está muy implicada en los movimientos para no perder influencia en Europa.

Colaboración de dos naciones

El lehendakari ha puesto en valor la colaboración que existe con Gales, también en el ámbito bilateral. Para el Gobierno vasco son evidentes sus similitudes, su volumen de población parecido, su cultura y lengua propias, sus instituciones, la solidaridad con la que la estación de Newport recibió a 56 niños vascos en 1937 en tiempos de guerra, y se refiere a ambos territorios como naciones que desean colaborar en beneficio de la ciudadanía para incrementar su nivel de bienestar. No es la primera vez que Drakeford visita Euskadi (lo hizo en 2018 cuando era ministro de Finanzas), pero sí es la primera vez en la historia que Ajuria Enea acoge a un primer ministro de Gales.

Urkullu reivindica también la firma del primer Memorándum de Entendimiento en 2018, y los retos compartidos en materia de demografía y envejecimiento, cambio climático, competencia económica de otras zonas del planeta, impulso de la lengua y la cultura en un mundo globalizado, la búsqueda de nuevas fuentes de energía, intercambio de conocimiento... En los últimos años, según Lehendakaritza, se han registrado avances sobre la inversión empresarial, las energías limpias, la innovación, la salud y la cultura. Ha destacado que se han financiado proyectos en común y que es "más necesaria que nunca la colaboración" tras el proceso de desvinculación del Reino Unido de la Unión Europea.

Urkullu cree que toda esta colaboración bilateral, que se desarrolla en el ámbito geográfico del Arco Atlántico, invita a seguir desarrollando una estrategia conjunta para hacer frente a estos retos, aunando fuerzas que generen sinergias. Por ello, junto al resto de miembros de la Comisión Arco Atlántico, están "comprometidos en el impulso de la macrorregión".

La macrorregión

La Comisión del Arco Atlántico la componen territorios de los estados español y francés, Irlanda, Reino Unido y Portugal, y abarca una población de 60 millones de personas que supone el 12% de la Unión Europea. Convertirse en macrorregión supondría contar con un marco político más institucionalizado, optimizar sus Presupuestos, o poder extender su cooperación a zonas ultraperiféricas y participar en conferencias internacionales.

A la Asamblea de Cardiff acudirá la secretaria de Acción Exterior, Marian Elorza. En ese marco, se abordará también la candidatura de Quebec como miembro asociado de la Comisión Arco Atlántico. Además, el lehendakari aspira a consensuar un texto para enviárselo al presidente español, Pedro Sánchez. En teoría, los gobiernos español y portugués apoyan la creación de una macrorregión. En el caso de los territorios de la cornisa cantábrica y los fronterizos con el Estado francés, existe una demanda adicional relacionada con el impulso del tren de alta velocidad, ahora que los informes del Elíseo cuestionan los plazos establecidos por la Unión Europea.

Intercambio de regalos

La reunión de Iñigo Urkullu y Mark Drakeford comenzó con un intercambio de regalos. Urkullu recibió unos gemelos de dragones, un pequeño dragón galés en bajorrelieve y un libro de paisajes; y Drakeford recibió una placa con el escudo vasco y el libro de Kirmen Uribe que resume la forma vasca de ser o de sentir.