Basta repasar la hemeroteca para ver quién era quién hace tan sólo siete años. El actual lehendakari, Patxi López, era sólo el secretario general del PSE; Josep Lluís Carod-Rovira, secretario general de ERC; Antonio Basagoiti, portavoz del PP en Bilbao; Jaime Mayor Oreja, vicesecretario de los populares; Xabier Arzalluz, presidente del EBB; Ángel Acebes, ministro del Interior; Mariano Rajoy, vicepresidente primero del Gobierno español; José María Aznar, presidente de ese mismo Ejecutivo.
Hoy todos han cambiado de puesto. Pero en febrero y marzo de 2003, como hoy, el caso Egunkaria era noticia. Tanto que, tras la operación policial ordenada por el juez Del Olmo, pocos políticos permanecieron en silencio. Aznar mismo estaba de viaje en México, pero se apresuró a dar su "apoyo y respeto" a la operación de la Guardia Civil.
Otros miembros de su Gobierno se mostraron en la misma línea. El actual líder del PP y entonces vicepresidente primero del Ejecutivo, Mariano Rajoy, calificó de "claramente inmoral" la subvención que diversas instituciones dieron al improvisado sustituto de Egunkaria, Egunero. Meses más tarde, en octubre, Rajoy volvió a hablar sobre las presuntas torturas a varios de los detenidos que negó ya en febrero. Consideró incluso lógico que ese tipo de denuncias las hiciera gente de la izquierda abertzale, pero "que lo haga, aunque sea por vía de la insinuación, un Gobierno [el vasco, en referencia a la solidaridad mostrada por Vitoria ante las denuncias], demuestra la locura a la que ha llegado ese Gobierno".
Un Gobierno "loco": Ataques al PNV
El dirigente hoy cuestionado por el caso Gürtel criticó que el entonces líder jeltzale, Josu Jon Imaz, fuera a una manifestación en apoyo a Egunkaria: "Que vaya a protestar por una resolución de la Justicia revela que hay gente que está dando pasos que son muy poco razonables, que se salen de la lógica democrática y que demuestran nulo respeto al Estado de Derecho y a los tribunales, uno de los pilares básicos de la democracia".
Jaime Mayor Oreja, ex vicesecretario general del PP y ex ministro del Interior, apuntaló la línea crítica hacia el PNV: "El PNV y el Gobierno Vasco, de ahí su radicalidad, tienen que justificar lo injustificable para favorecer a un medio de comunicación que, evidentemente, según el juez, forma más parte de un entorno terrorista que de lo que es un medio de comunicación". El popular cifró las subvenciones en más de "1.000 millones de pesetas desde 1996".
El también miembro del PP vasco y entonces portavoz de los populares en el Ayuntamiento de Bilbao, Antonio Basagoiti, consideró "insólito" que el 24 de febrero el alcalde, Iñaki Azkuna, convocara una Junta de Portavoces: "Es muy significativa la posición que está teniendo el PNV en toda la CAV y Azkuna en particular de servilismo a Batasuna". Para el actual líder del PP en Euskadi, el partido jeltzale "pretende recoger sus resultados electorales, pero están agachando la cabeza completamente ante el brazo político de ETA".
"Presunto terrorista": Otamendi "ataca la democracia"
Más allá fue el ministro del Interior, Ángel Acebes. El dirigente popular respondió con contundencia a la denuncia de torturas efectuada por Martxelo Otamendi: "Hay que valorarlas como las afirmaciones de alguien que es presuntamente terrorista y por lo tanto, lo que ataca y vulnera permanentemente son los derechos, las libertades y la democracia".
El PSOE, entonces en la oposición, hizo pública su postura a través de su secretario general en Euskadi y su portavoz en el Congreso de los Diputados. Patxi López criticó que "muchos" hablaran "de la presunción de inocencia de Egunkaria, pero no de la del juez, al que se le está condenando sin conocer los datos y las pruebas". Para el líder socialista, "el juez parece que tiene datos que indican que [el diario] participa del entramado de ETA". El actual lehendakari se mostró sorprendido "de la rapidez y contundencia con la que responde el tripartito [PNV, EA y EB]" ante el cierre del diario, "frente a la reacción, más tibia, ante hechos tan probados como un atentado".
Jesús Caldera mostró "respeto" por un procedimiento judicial que daría "respuesta a las inquietudes". El portavoz socialista pidió al juez Del Olmo hace siete años "agilidad para instruir cuanto antes esta causa".
Dos de las voces más críticas llegaron por parte del PNV y de ERC. Xabier Arzalluz llegó a afirmar que los fontaneros de La Moncloa estudiaban una manera de "suspender" las elecciones municipales en Euskadi. Necesitarían crear "una gran crispación social" y "tensión constante", para lo que aprovecharían una actuación como la de Egunkaria, "lesión clara de la democracia".
El secretario general de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, afirmó que el cierre era una "auténtica barbaridad". "El teniente coronel Aznar está obsesionado con Euskadi. Lo que le molesta no es tanto que exista ETA sino la existencia de Euskadi y Catalunya con voluntad de ser".
En aquella época, el cantante irunés Fermin Muguruza fue abucheado por compañeros de profesión tras homenajear a los detenidos cuando recibió un galardón en los VII Premios de la Música.
Hoy, el tiempo se ha tragado a unos y ha aupado a otros, pero sus declaraciones permanecen.
Dos guardias civiles custodian la entrada a la sede de "Egunkaria" en Andoain en la operación policial desarrollada en 2003. Foto: efe