Una mayor "excelencia del vino" a partir de viñedos sostenibles. A dar ese "paso importante" se han comprometido los por ahora ocho viticultores de Rioja Alavesa y Rioja Alta que han fundado la asociación Subsierra, liderada por el reconocido bodeguero alavés Juan Luis Cañas y cuya firma, Amaren, (Villabuena de Álava) forma parte de iniciativa.

Junto a ella, se integran otras con solera, como Carlos Sánchez (Labastida), Teodoro Ruiz Monje (San Vicente de la Sonsierra), Loli Casado (Lapuebla de Labarca), Ostatu (Samaniego), Artuke (Baños de Ebro), Bodegas Tierra (Labastida) y Tentenublo (Lanciego). Ocho viñedos familiares que dan como resultado "318 hectáreas, 77 referencias de vino y 6 pueblos".

"Si queremos sobrevivir, tenemos que ser ecológicos"

Y para lograr esa "excelencia", el proceso pasa por "certificar el origen de uva a la Sonsierra" y "que los vinos vengan de una viticultura ecológica". Todo ello, para sacar al mercado y ofrecer al cliente un vino "de calidad" y 100% ecológico. "Si queremos sobrevivir, tenemos que ser ecológicos". Esas han sido palabras que han resonado este miércoles en la presentación celebrada en la Casa del Cordón de la capital alavesa; escenario que ha servido para compartir los detalles de un proyecto en el que llevan sumergidos alrededor de cinco años.

Algunos vinos de bodegas alavesas y riojanas adheridas a la asociación Subsierra Alex Larretxi

"Desde Briñas hasta Moreda"

Subsierra se ubica al cobijo de la Sierra Cantabria, en el margen izquierdo del río Ebro. "Desde Briñas hasta Moreda de Álava", ha apostillado el propio Cañas, quien ha destacado que esta unión de viñedos se basa en valores como el respeto al territorio, la apuesta por bodegas de carácter familiar, el trabajo bien hecho y en la práctica de una viticultura ecológica que protege y realza la biodiversidad mientras se preservan las técnicas tradicionales. "Nada de máquinas", ha matizado.

En este sentido, la asociación, que por el momento asegura que sus vinos no van a contar con distintivo, se ciñe a la puesta en valor a los pequeños productores, defender la recuperación del viñedo viejo, participar en el paisaje cultural de Rioja Alavesa y Alta asegurando un precio justo para sus productos así como promover la sostenibilidad en "toda la cadena de valor".

"Generación tras generación"

El cultivo del rico caldo de la región parte de bodegas familiares que "generación tras generación han sabido mantener el amor y el legado por la elaboración de vino". Y cada una, va a poder compartir en Subsierra su propia historia y la especialización en la elaboración de vinos de "alta calidad".