PSE-EE y PNV, partidos que sustentan en minoría el gobierno municipal de Vitoria, han llegado a un acuerdo con EH Bildu para sacar a delante los presupuestos de este año, los primeros presupuestos de la legislatura.
Socialistas y nacionalistas cuentan con 12 de los 27 concejales del consistorio vitoriano, en el que EH Bildu, con 7 ediles, fue la fuerza más votada.
Este pacto se da después de que este mismo miércoles el candidato a lehendakari de la coalición, Pello Otxandiano, admitiese de que había posibilidades de cerrar un acuerdo y de que PP y Elkarrekin rechazasen esta posibilidad.
Cambio de guión y voluntad de acuerdo
El guión cambiaba este miércoles en el Ayuntamiento de Vitoria ante la apertura de una vía para el acuerdo presupuestario entre el gobierno PSE-PNV y EH Bildu. A punto de agotarse el plazo para las negociaciones y cuando la prórroga parecía la opción más factible, el giro pactista de EH Bildu servía de salvavidas al gabinete de la socialista Maider Etxebarria, empeñada en sellar el inicio de su mandato con un acuerdo presupuestario.
Socialistas y EH Bildu se motraban dispuestos a refrendar su reciente sintonía también en el Ayuntamiento de Vitoria –al igual que ha ocurrido en los municipios alaveses de Oion e Iruña de Oka– meses después de que el PP hiciese alcaldesa a Etxebarria y arrebatara el bastón de mando a EH Bildu, la fuerza más votada en las urnas de la capital alavesa.
De esta manera, el acuerdo parecía cobrar forma. Las tres formaciones retrasaban este miércoles el calendario presupuestario para darse dos días más de plazo para continuar negociando y atar los últimos flecos pendientes antes del factible apretón de manos.
El gobierno municipal hacía publica su voluntad de llegar a un acuerdo con la coalición soberanista para dotar al Ayuntamiento de Presupuesto. “Hemos decidido darnos un tiempo para seguir avanzando e intentar cerrar la negociación de los próximos presupuestos de 2024, que serán claves en este avance de legislatura porque Vitoria necesita un presupuesto que genere estabilidad y refuerce los servicios públicos. Ya dijimos que este gobierno iba a apurar hasta el último minuto para aprobar las cuentas, así que seguimos trabajando para alcanzar un acuerdo de manera inminente”, indicaba este miércoles la alcaldesa.
Por su parte, el jeltzale Iñaki Gurtubai, el único en hablar ante los micrófonos y cámaras, aseguraba que había deseo de rubricar un acuerdo el viernes. “No diría que estamos a punto, pero hay voluntad por ambas partes. A ver si se materializa, espero que sí”, declaró a la salida de la sesión de Hacienda.
La callada por respuesta
En cambio, el grupo municipal de EH Bildu optó por la callada por respuesta. Su portavoz, Rocio Vitero, abandonó la sala sin responder a las preguntas de los periodistas, al igual que el socialista y concejal de Hacienda, Jon Armentia.
Quien sí se posicionó fue el candidato soberanista a lehendakari, Pello Otxandiano, al afirmar que ve posible que su coalición pacte los presupuestos del Ayuntamiento de Vitoria con PSE-PNV, convencido de que “este país necesita acuerdos amplios que respondan a las necesidades de la ciudadanía”. Llegados a este punto, con EH Bildu como único interlocutor, tras desligarse PP y Elkarrekin de la negociación presupuestaria, declaraba Otxandiano en Radio Euskadi que la coalición soberanista tenía "una disposición absoluta también en Gasteiz de llegar a acuerdos”.
Gobierno en minoría
Recordar que el gabinete Etxebarria gobierna en minoría en Gasteiz, por lo que necesita el respaldo de uno de los tres partidos de la oposición para sacar adelante las cuentas municipales de este año. PP y Elkarrekin, en principio, el interlocutor más cómodo para el gabinete Etxebarria, ya han dicho que no.
Más allá de la política local que se cuece en la Casa Consistorial, este acercamiento entre PSE-PNV y EH Bildu se puede enmarcar en los últimos pactos alcanzados en el Parlamento Vasco en materia de Transición energética y Cambio climático e Infancia. También en los municipios alaveses de Oion e Iruña de Oka para aprobar los presupuestos.
El guión de la Diputación
Otra cosa es el guión seguido allí donde en lugar de gobernar el PSE junto con el PNV, es al revés.
Así ha ocurrido en Amurrio, municipio en el que EH Bildu anunció que no apoyará los presupuestos del gobierno de jeltzales y socialistas, o en la Diputación alavesa.
En la institución foral el Gobierno de Ramiro González sacó adelante en diciembre el proyecto de norma foral de medidas tributarias para 2024 con el apoyo del PP, movimiento que evitó la aprobación de una enmienda de EH Bildu que iba a suponer, afirmó el diputado general, una merma de diez millones en el Presupuesto de la Diputación.
Esto a su vez habría supuesto que el Ayuntamiento de Vitoria perdiera cuatro millones de euros provenientes del Fofel, el Fondo de Financiación de Entidades Locales.
Ademas, dijo Ramiro González, las Cuentas forales habrían tenido una cuantía menor que las del año en curso. “No podíamos ir a un Presupuesto de recortes y la enmienda de EH Bildu tenía ese objetivo”, aseguró entonces.
Apenas una semana antes de este acuerdo entre PNV-PSE y EH Bildu, el Gobierno foral tuvo que retirar su proyecto de Presupuestos para 2024 tras constatar la imposibilidad de lograr el apoyo de uno de los grupos de la oposición en las Juntas Generales al plan económico prorrogar las Cuentas para el ejercicio 2024.
Intensa negociación
Las tres formaciones han llevado a cabo una intensa negociación en los últimos días cuando incluso la alcaldesa, la socialista Maider Etxebarria, llegó a admitir hace una semana que la prórroga presupuestaria era "cada vez más factible".
EH Bildu presentó enmiendas por valor de 12 millones de euros y articuladas en cinco bloques: mejorar la atención a personas mayores, destinar vivienda pública a alquiler accesible, impulsar el empleo y dinamizar locales comerciales, acelerar la transición energética con comunidades energéticas y una movilidad sostenible, y remodelar el Iradier Arena.
Este acuerdo entre las tres fuerzas se ha logrado en un ambiente político muy especial, marcado por el hecho de que PSE-EE y PNV dejaran sin la alcaldía de la ciudad a la candidata soberanista, Rocío Vitero, que fue la más votada en las elecciones locales.
Además, se produce a escasos meses de que se celebren elecciones al Parlamento Vasco en las que PNV y EH Bildu parten como las formaciones con posibilidades de ser la fuerza más votada.
EH Bildu ha convocado esta misma mañana una rueda de prensa para dar a conocer el alcance de este pacto
Las enmiendas de EH BIldu
Así, EH Bildu plantea dotar a la ciudad de nuevos recursos sociales y servicios descentralizados, con la construcción de más viviendas comunitarias en los barrios.
En concreto, el próximo año para 30 personas y la construcción, ya a lo largo de la legislatura, de 60 nuevas viviendas comunitarias, el doble de las que hay ahora.
Además, propone abrir un nuevo comedor social para 60 personas en Sansomendi y que esta legislatura, manteniendo la inversión, funcionen otros tres en Judimendi, Aranbizkarra y San Cristóbal, ofreciendo menús a 200 personas más.
Vitero pone también sobre la mesa la creación de un centro de atención a mujeres en situación de vulnerabilidad y exclusión social.
Respecto a aumentar la oferta de vivienda pública, habla la coalición soberanista de la recompra anual de 20-25 viviendas de protección mediante la fórmula de tanteo y retracto para ponerlas en alquiler a un precio asequible, tanto para la juventud como para las personas más vulnerables.
Incluye en este bloque la rehabilitación de al menos diez viviendas al año de Ensanche 21, llegando a cuarenta en la actual legislatura.
Comunidades energéticas
En materia de transición energética, negocia con el gobierno local la puesta en marcha de comunidades energéticas a nivel municipal, mediante un programa propio para los barrios degradados de Gasteiz.
Otras de sus propuestas pasan por bicis de alquiler, reforma del Iradier Arena y un espacio de referencia para la creación cultural y para los artistas locales, entre otras.
Las enmiendas se debatirán y votarán el próximo viernes, según el calendario acordado ayer y, salvo sorpresa de última hora, se dará luz verde a la mayoría de las peticiones de la formación abertzale, a cambio de que la formación que lidera Rocio Vitero vote a favor de los presupuestos redactados por socialistas y jeltzales.