Tres son las zonas de Vitoria con peor calidad de aire y en las que “habría que poner el foco” de cara a la definición de acciones concretas para reducir las emisiones del tráfico, según concluye el proyecto Cycling with Clean Air, que lidera la Coordinadora en Defensa de la Bicicleta (ConBici) en 18 ciudades del Estado y que en la capital alavesa desde principios de 2023 se ha llevado a cabo por voluntarios de Bizikleteroak.

Para ello, a fecha de 31 de octubre, realizaron 117 horas de medición y aportaron a la base de datos 409 recorridos mientras pedaleaban al enganchar a las mismas un medidor portátil, del tamaño de la palma de una mano, que recoge partículas de aire de 2,5 micras cada cinco metros (PM 2,5) en tiempo real. Unas partículas que pueden ser perjudiciales, ya que debido a su tamaño, pueden entrar en el riego sanguíneo.

En la capital alavesa, en concreto, destacan dos zonas en naranja (15-25 μg/m3 ). Se trata de la de Betoño, que es la entrada a la ciudad por el norte, próxima a una zona industrial, y la segunda son los accesos por el suroeste y las vías de tráfico para ir de este a oeste de la ciudad por el sur, como son Portal de Castilla y la calle Tanis de Aguirrebengoa, Zumabide y Iturritxu, Paseo de la Zumaquera y Bulevar de Salburua. La tercera zona en la que habría que poner el foco, según el estudio, es la del Casco Medieval, puesto que “presenta también un nivel amarillo y puntos naranjas aislados. La primera fase del proyecto de implantación ZBE (Zona de Bajas Emisiones) incluye esta zona”.

“Datos complementarios”

El objetivo de este estudio es presentar a las autoridades sus resultados para que se tengan “datos complementarios a los que disponen de las estaciones fijas que, en nuestra opinión, son escasos” y exponer el estado actual de definición e implantación del plan de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) para que las medidas previstas “sean útiles y permitan una buena implementación” con la bicicleta como principal aliada. “Queremos que nuestras autoridades se tomen en serio el cambio climático, el desarrollo de los planes de movilidad sostenible, la implementación de las Zonas de Bajas Emisiones y coloquen el bienestar de la ciudadanía como prioridad”, explica el informe.

La media en todas las ciudades participantes del estudio es de 9,2 (nivel amarillo (6-10 μg/m3). En el caso de Vitoria, el valor medio de la concentración de PM 2,5 entre el 1 de enero y el 31 de octubre de 2023 es algo más bajo: de 8,0 μg/m3. Pese a ello, también está en rango amarillo ya que este valor también supera la recomendación de la OMS (Organización Mundial de la Salud) para la media anual de PM 2,5, que es de 5 μg/m3, aunque está por debajo del valor que establece la propuesta de Directiva del Parlamento Europeo y del Consejo relativa a la calidad del aire ambiente y a una atmósfera más limpia en Europa, que es de 10 μg/m3 y de la regulación vigente, Directiva 2008/50/CE y RD 102/20114, que es de 25 μg/m3.

El estudio

Ciudades participantes. El proyecto de ConBici empezó en enero de 2022 en 12 ciudades. No obstante, durante el 2023 se incluyeron más. En total, las ciudades analizadas son Madrid, Barcelona, Valencia, Valladolid, Burgos, Cartagena, Albacete, Terrassa, Málaga, Alicante, Vitoria, Zaragoza, Vigo, Lorca, Gijón, Santiago de Compostela, Las Palmas y A Coruña. Estos esfuerzos resultaron en 5.458 recorridos que proporcionaron datos precisos y en tiempo real sobre la calidad del aire

Las ciudades que cumplen. El informe destaca que, a pesar de la variación a lo largo del día, con concentraciones más altas de partículas entre las 7.00 y las 9.00 horas, solo en 8 de las 18 ciudades se cumplen las recomendaciones de la OMS en la mitad de las mediciones realizadas. Estas urbes que cumplen las recomendaciones de la OMS son Las Palmas, Burgos, Albacete, A Coruña, Valladolid, Madrid, Santiago y Vigo.

Voluntarios de Vitoria. Durante 2023, el equipo de voluntarios de Bizikleteroak midió la calidad del aire durante 117 horas. Después de procesar los datos descartando recorridos no válidos para el estudio, se incorporaron a la base de datos 409 recorridos.

Recomendaciones. El informe de ConBici ofrece entre sus recomendaciones “clave” para abordar la problemática de la calidad del aire en entornos urbanos: promover el uso de transportes sostenibles, transparencia en la Información, seguridad para los ciclistas y seguimiento continuo.


Conjunto de medidas

El análisis estadístico realizado indica que el 45,3% de las medidas realizadas en Vitoria se encuentran en el rango 0-5 μg/m3 (el verde), aunque la mayoría (52,5%) estaría en otros colores más alarmantes. Este es el caso del 27,8% que se encuentran en el rango 5 -10 μg/m3 (el amarillo 1), el 12,3% del rango 10-15 μg/m3 (amarillo 2) y el 14,7% restante, que superaron los 15 μg/m3.

En cuanto al nivel de contaminación por partículas finas (PM 2,5) al que ha estado expuesto el voluntariado mientras se desplazaba en bicicleta por la ciudad tomando muestras, el 54,7% del tiempo respiraron aire que no cumplía la recomendación de la OMS.

Y comparando con las tres estaciones que hay en la urbe gasteiztarra que monitorizan el material particulado 2,5 (Avenida Gasteiz, 3 de Marzo y Los Herrán), la distribución diaria tanto en la Avenida Gasteiz como en Los Herrán “muestran un patrón diario típico de un entorno urbano”, con valores más altos durante las primeras horas de la mañana y mínimos al mediodía para ascender ligeramente las primeras horas de tarde. Los valores promedio anual de PM 2,5 en estas estaciones son 7,9 μg/m³ para Avenida Gasteiz y 9,8 μg/m³ para Los Herrán, respectivamente, valores similares a los obtenidos con las medidas del proyecto Cycling with Clean Air con un promedio de 8,0 μg/m3. En cambio, el perfil obtenido con los datos de 2023 de la estación 3 de Marzo “no se ajusta a un patrón urbano típico y el promedio es de 10,6 μg/m³”, un valor más elevado que el obtenido con los datos del proyecto.

Por último, el proyecto Cycling with Clean Air finaliza con una serie de recomendaciones para mejorar la calidad del aire en entornos urbanos, entre las que se incluyen la priorización del uso de transportes sostenibles y garantizar la seguridad jurídica de los ciclistas. También se insta a las instituciones a dar información transparente sobre la contaminación del aire y a continuar midiéndola para evaluar el impacto de las acciones implementadas.