Las oficinas municipales de San Martín acogieron en la tarde del martes la reunión informativa que da el pistoletazo de salida al proceso participativo llamado a definir el funcionamiento de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Vitoria-Gasteiz.

Asociaciones vecinales, colectivos del ámbito de la movilidad y otros agentes sociales participaron en un proceso que en lo sucesivo establecerá diversos grupos de trabajo, recepción de aportaciones y un encuentro final de dinamización y conclusiones para consensuar las condiciones por las que se regirá el futuro espacio de tráfico restringido.

El resultado de todo este proceso se plasmará en la ordenanza reguladora de la ZBE que ha de limitar el tráfico de vehículos a motor en el centro de la ciudad.

En concreto, la ZBE abarcará el Casco Medieval y la parte del Ensanche delimitada por las calles La Paz, Ortiz de Zárate, Florida, Ramón y Cajal, Luis Heintz, Magdalena, Vicente Goicoechea y Cercas Bajas, dos áreas en las que ya hoy día las peatonalizaciones han limitado de forma importante el acceso a los coches. El objetivo de futuro es eliminar el tráfico de paso en el interior del perímetro definido y otorgar la prioridad a las personas residentes.

En imágenes: Arranca el proceso participativo para diseñar la zona de bajas emisiones ALEX LARRETXI

El Ayuntamiento afirma que la implantación de la Zona de Bajas Emisiones será gradual. En una primera fase se informará a la ciudadanía de las nueva reglas y se apercibirá de los incumplimientos de las condiciones de acceso, sin entrar todavía en la imposición de sanciones.

Delimitación de la futura Zona de Bajas Emisiones.

En esta primera fase no será obligatorio el uso de distintivos ambientales (azul, eco, verde y amarillo) para determinar qué vehículos pueden circular por la ZBE y, transcurridos cuatro años, se monitorizará la situación para comprobar las mejoras en la calidad del aire derivadas de las medidas adoptadas.

La segunda fase de la ZBE, prevista para 2027, tendrá tres cambios sustanciales: se modificará el perímetro de restricción de tráfico, ampliándolo por las calles Ramiro de Maeztu, Domingo Beltrán y Coronación; se establecerán restricciones a la circulación de vehículos según distintivo ambiental, marcando excepciones en base a la renta de las personas titulares del vehículo o dirigidos a profesionales de gremios próximos a la jubilación; y se activará la OTA ambiental, una reforma del estacionamiento en superficie de pago donde los vehículos abonarán las tarifas en base a su nivel de emisiones. También se contempla la ampliación de la zona OTA.

En imágenes: Arranca el proceso participativo para diseñar la zona de bajas emisiones ALEX LARRETXI

En 2030 llegará la tercera fase de la Zona de Bajas Emisiones. Se prevé un mayor grado de restricción de paso de vehículos en base a sus distintivos ambientales (con las excepciones ya marcadas en la fase 2) y una nueva ampliación del ámbito de la OTA ambiental.

Por otro lado, se están ultimando los trámites para licitar las cámaras encargadas de controlar el acceso de vehículos a la zona, uno de los pilares del sistema. Serán cerca de una veintena de dispositivos ubicados en todos los puntos de entrada a la ZBE.

Zona de Bajas Emisiones

  • Fase 1. En un primer momento se informará de las nuevas condiciones de acceso al centro y se apercibirá de los incumplimientos, sin imponer sanciones.
  • Fase 2. A partir de 2027 se ampliará el perímetro de restricción de tráfico por Ramiro de Maeztu, Domingo Beltrán y Coronación; entrará en vigor el distintivo ambiental y se implantará la OTA ambiental.
  • Fase 3. En 2030 habrá un mayor grado de restricción de paso de vehículos y una nueva ampliación de la OTA ambiental.