Los grandes grupos del Parlamento Europeo (PE) alcanzaron un acuerdo sobre la regulación que regirá el desembolso de la mayor parte del Fondo de Recuperación pos-pandemia en el que piden rebajar la exigencia de acometer reformas estructurales y cumplir las metas fiscales para recibir ayudas.
El texto, que cuenta con el apoyo del Partido Popular Europeo, los Socialistas y Demócratas, los liberales de Renovar Europa y los Verdes, será votado en pleno en la segunda semana de noviembre y fijará la posición de la Eurocámara para negociar con los Estados de la Unión Europea la regulación definitiva del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia.
Este canalizará 672.500 millones de euros de los 750.000 millones del Fondo y la regulación fija aspectos como las recomendaciones que tendrán que seguir los Gobiernos al hacer sus planes de recuperación o cómo los evaluará la Comisión Europea.
"Nuestra propuesta es muchísimo más concreta que la de la Comisión y la del Consejo, más verde, social e igualitaria, y más flexible con la participación e importancia del Semestre Europeo en el plan", dijo este martes en rueda de prensa la eurodiputada socialista Eider Gardiazábal, ponente de la regulación en el PE.
El acuerdo de estos grupos parlamentarios elimina el artículo 9 que incluía la propuesta del Consejo, que prevé la suspensión del pago de ayudas si un país incumple las recomendaciones hechas por la Comisión en el Semestre Europeo, en particular las relativas a "aspectos fiscales".
Los eurodiputados creen que no tiene sentido introducir esta condicionalidad macroeconómica en un momento en que el Pacto de Estabilidad y Crecimiento -las normas de control de déficit y deuda- no se están aplicando por la pandemia y, además, van a ser revisadas.
"Tendremos este debate cuando las cosas se tranquilicen y veremos cómo podemos avanzar hacia una senda de estabilidad macroeconómica, pero como no se va a avanzar va a ser sancionando a los Estados y congelando pagos", explicó Gardiazábal.