Aunque la primavera ya manda, la Red Municipal de Teatros de Gasteiz todavía no ha cerrado su programación de invierno. Lo hace, de hecho, este sábado y domingo con los dos pases que se van a realizar de un montaje especial en muchos sentidos, 1936. Eso sí, desde que se pusieron a la venta las entradas, este espectáculo agotó todo en segundos. Una vez más desde que cerró el Principal, el Félix Petite (centro cívico Ibaiondo) tiene colgado el cartel de completo en la taquilla.
Para quienes sí tengan su pase en la mano cabe recordar que el horario del inicio de cada sesión va a ser distinto a lo que suele acostumbrar la Red. En este caso, las actuaciones ambos días van a arrancar a las 17.30 horas. La razón es bien sencilla. La obra dura en torno a cuatro horas y media –hay descanso– y esto conlleva empezar antes de lo habitual –que son las 19.30 horas– para no acabar demasiado tarde.
A partir de ahí, sobre las tablas se encontrará un elenco que no necesita de presentaciones y que está conformado por Antonio Durán Morris, Alba Flores, Natalia Hernández, María Morales, Paco Ochoa, Blanca Portillo, Guillermo Toledo y Juan Vinuesa, todos ellos bajo la dirección de Andrés Lima y dando vida a un montaje cuyos textos firman el propio Lima, Albert Boronat, Juan Cavestany y Juan Mayorga.
Un 18 de julio
Seguramente daría para más de una reflexión y unas risas con el propio Petite que el escenario que lleva su nombre se traslade con este montaje al 18 de julio de 1936, al inicio de la Guerra Civil, a un año marcado por el conflicto, a una lucha que hoy sigue, de distintas formas, siendo presente.
“Todos esos discursos que sacamos en la función, del general Mola, del general Yagüe, de Queipo de Llano, del obispo Gomá, que nos suenan escalofriantes, los estamos volviendo a escuchar hoy en día en los medios de comunicación, en los partidos políticos, en los parlamentos... Hasta el punto de que esta nueva internacional ultrarreaccionaria ya tiene a Argentina, Perú, Estados Unidos...”, apuntaba hace no mucho Toledo en una entrevista con el Grupo Noticias.
“Tenían en sus armarios la camisa azul, las camisas pardas alemanas, o las camisas negras fascistas, pero nunca se deshicieron de ellas. Es más, ahora se las están volviendo a poner. Y va Elon Musk no se corta y hace el saludo nazi en un acto que sabe que va a ver el planeta entero. Así que 1936 va de que no olvidemos nuestro pasado, pero, sobre todo, de que tenemos que estar alerta porque está aquí otra vez”. Así se va a ver en Vitoria.