El 10 de enero de 2024 se cumplirá un siglo del nacimiento del escultor donostiarra Eduardo Chillida. Es por ello que la Fundación Chillida-Belzunce ha organizado un plan de celebraciones que arrancará desde ya mismo y que tiene previsto prolongarse durante los dos próximos años. Luis y Susana Chillida, hijos del artista, así como Mikel Chillida, uno de sus nietos, presentaron ayer en Madrid un avance de la programación que arrancará en los museos del País Vasco, pero que tiene vocación internacional, como la tenía este escultor del tiempo, el vacío y la gravedad.

Las actividades comenzarán esta primavera con la instalación en Chillida Leku de la monumental escultura Lugar de encuentros IV, una obra de hormigón de 16 toneladas de peso que se trasladará al caserío Zabalaga de Hernani con motivo de las reformas del museo Bellas Artes de Bilbao. No obstante, la primera gran muestra de este centenario se inaugurará en el extranjero, en el Kunsthalle Krems de Austria, que acogerá hasta 80 piezas de Chillida y que podrá visitarse entre finales de abril y septiembre de este 2023. “Eduardo Chillida siempre tuvo una vocación universal, sin perder su punto de apoyo, su País Vasco. Él decía que era un árbol con las raíces en su tierra y los brazos abiertos al mundo. Es una manera estupenda de enfatizar esa vocación de alguien que es capaz de trascender a un lugar sin perder su punto de apoyo”, explicó su nieto, que adelantó que se encuentran trabajando en la organización de otras exposiciones en el circuito internacional, de las que darán cuenta más adelante. En el plano local, además de Chillida Leku, San Telmo, Tabakalera y Artium también se sumarán a las actividades del centenario del creador del Peine del Viento.

Asimismo, ayer mismo se puso en marcha una página web sobre la vida y obra de Eduardo Chillida –eduardochillida.com–, en la que, además de información sobre las actividades del centenario, también se podrá consultar información biográfica sobre el donostiarra, así como una base de datos de su catálogo, pensada para un acercamiento “más académico” a su trayectoria, “uno de los pilares” de este centenario. En este mismo sentido, la editorial donostiarra Nerea ha editado el cuarto volumen del catálogo razonado sobre Chillida.

“Los artistas, aunque desaparezcan, siempre permanecen”, aseguró Luis Chillida, presidente de la fundación en honor a su padre y a su madre, que ha remarcado la necesidad de divulgar la figura de Eduardo, tanto desde el plano artístico como desde el humano, también a las nuevas generaciones. No en vano, en 2022 se cumplieron ya dos décadas desde el fallecimiento de uno de los más célebres integrantes del Grupo Gaur.

La cineasta Susana Chillida tomó la palabra para insistir que la obra de Eduardo es tan extensa y con una envergadura tan “importante” que les resultaba “difícil” circunscribir los actos a un periodo corto. Es por ello que, “para sacarle jugo” y “dejar que repose”, el programa se extenderá desde principios de 2023 hasta principios de 2025.

Nuevo logotipo

Las conmemoraciones se celebrarán bajo el nombre Eduardo Chillida: 100 años, para el que también se ha diseñado un nuevo logotipo. “Cuando alguien se lo encargaba, nuestro padre decía que lo más difícil era poder resumir algo en un logo, que era un trabajo muy duro”, relató Luis. Así, confesó que la familia apostó por “algo especial”: la imagen del centenario es aquella que Eduardo Chillida utilizaba para firmar y “la firma está en todo lo que hizo”. El logo se basa en una rúbrica que representaba las tres iniciales del nombre y los dos primeros apellidos del artista –una E, una C y una H–, superpuestas una encima de la otra.

Mikel Chillida, por su parte, insistió en la idea de que las actividades de este anirversario tendrán un carácter “multidisciplinar”, no se centrarán solo en la organización de exposiciones: “Como decía el aitona, lo que es de uno es casi de nadie”. Siguiendo las palabras de Eduardo, la Fundación se ha rodeado de “aliados” para desarrollar un programa de peso. Además de, por supuesto, la galería suiza Hauser & Wirth, responsable de la gestión del legado del escultor, otras instituciones como el Gobierno Vasco, la Euskadiko Orkestra, Fundación Kutxa o la distribuidora de cine A Contracorriente Films también colaborarán con los fastos por esta efeméride. Precisamente, esta distribuidora trabaja en un proyecto de documental, que dirigirá Arantxa Aguirre, sobre cómo el caserío Zabalaga se convirtió en Chillida Leku, la utopía de Chillida.