El Baskonia intentará este jueves a partir de las 20.00 horas encadenar por primera vez en lo que va de temporada tres victorias consecutivas imponiéndose al Alba Berlín en el Uber Arena. Se trata de un escenario propicio para conseguirlo, ya que, aunque al Baskonia le está costando mucho sumar victorias a domicilio en la presente Euroliga –sólo dos triunfos en 13 salidas–, el conjunto alemán ocupa el último puesto de la clasificación y también tiene un balance muy flojo como local de 2 victorias y 12 derrotas.
Además, el conjunto dirigido por Pablo Laso contará con toda su plantilla al completo a disposición por primera vez desde que Tadas Sedekerskis cayera lesionado ante el Estrella Roja el pasado 2 de enero. En efecto, Kamar Baldwin, que se ha perdido los últimos cuatro compromisos del equipo ante el Partizan, el Andorra, el Zalgiris y el Gran Canaria a causa de una lesión en la articulación metatarsofalángica del primer dedo del pie derecho sufrida durante las ventanas FIBA, apunta a entrar en la convocatoria.
El exterior norteamericano con pasaporte georgiano participó el martes en la sesión de trabajo del equipo en el Bakh, como se pudo ver en las imágenes del entrenamiento compartidas por el club, y ayer a primera hora viajó junto al resto de la expedición a Berlín, por lo que si no hay contratiempos y Laso lo cree conveniente, podrá contar con minutos ante el Alba.
De ser así, el equipo recuperará a una pieza clave que antes del parón había protagonizado grandes actuaciones como pareja de Forrest en la dirección de juego. Su ausencia, de hecho, ha condicionado al equipo, ya que Jaramaz no ha logrado cubrir su hueco con garantías, Forrest se ha visto más limitado al timón y Luwawu-Cabarrot ha tenido que jugar minutos como escolta e incluso como base, donde no se encuentra tan cómodo como en el puesto de alero.
Sin margen de error
El regreso de Baldwin será bienvenido por el Baskonia, que necesita poner toda la carne en el asador en las seis jornadas que restan de Euroliga si quiere tener una mínima opción de alcanzar los puestos de play in, que los marca el Armani Milán con 15 victorias frente a las 12 de los alaveses. La falta de consistencia y su escaso rendimiento a domicilio este curso le ha impedido encadenar tres victorias consecutivas y hoy es una buena oportunidad para desprenderse de ambos sambenitos.
Eso sí, tal y como apuntó Donta Hall en la previa del encuentro, “no hay partido fácil en la Euroliga” y el Alba Berlín, aunque ya no se juega nada y es el equipo más modesto del torneo, seguro que pondrá en dificultades a los alaveses.
El conjunto berlinés, que juega sin ninguna presión, propone un baloncesto muy vertical con el que intenta correr la cancha a toda velocidad con dos pívots muy móviles como el exbaskonista Wetzell y David McCormack y anotar en los primeros segundos de las posesiones, ya que en estático le faltan los jugadores decisivos con los que sí cuentan otros equipos de la Euroliga. Eso sí, habrá que ver si el nuevo técnico Pablo Calles propone cambios en el estilo.
Esa agresividad en ataque hace que en defensa les falte dureza física y orden, lo cual explica que sean el equipo que más puntos encaja. Si el Baskonia consigue controlar el ritmo del encuentro y evita que se convierta en un correcalles en el que la moneda puede caer de cualquier lado, tendrá gran parte del trabajo hecho.
Los dos interiores mencionados, junto a la experiencia de dos viejos conocidos de la ACB como Matt Thomas y Hermannsson y el desparpajo de los jóvenes Spagnolo y Procida, son las principales armas de un Alba Berlín que se ha reforzado recientemente con el fichaje del ala-pívot Baker II. Al igual que el Baskonia, no cuenta con bajas significativas y hará lo posible por terminar con las opciones de play in de los gasteiztarras.