El Baskonia se reencontrará esta noche a partir de las 20.30 horas con un viejo conocido como es el interior Johannes Voigtmann, que esta temporada está vistiendo su cuarta camiseta distinta desde que el conjunto gasteiztarra, donde permaneció entre 2016 y 2019, le dio la oportunidad de debutar en la Euroliga.
El jugador alemán, con una muñeca privilegiada desde el perímetro, está desarrollando una carrera al alcance de muy pocos en la máxima competición europea, en la que sin hacer mucho ruido y desde su salida de Vitoria ejerciendo un rol específico como cuatro o cinco encargado de ensanchar la cancha con su amenaza exterior, ya acumula 261 encuentros oficiales.
De hecho, es el 40º jugador histórico en participaciones en la Euroliga por delante de clásicos del torneo como Fran Vázquez, Singleton, Heurtel, Maciulis o Papaloukas y, a sus 32 años, todavía le queda margen para seguir engordando sus números.
Los perfiles como el suyo no abundan en el torneo continental y precisamente le vendría muy bien este curso a un Baskonia que se ha quedado sin esa figura de interior con buena muñeca desde los 6,75 metros con la marcha de Matt Costello.
Trotamundos
Esa escasez de pívots abiertos explica tal vez la importancia que Voigtmann ha tenido en todos los equipos por los que ha pasado. El interior de 2,11 metros puede presumir de haber sido importante en el Baskonia, el CSKA de Moscú (2019-2022), el Armani Milán (2022-2024) y ahora en su regreso a Alemania con el Bayern de Múnich.
Esta está siendo su temporada más pobre junto a la 2022-23 en cuanto a números ofensivos con 5 puntos de media y un 28,2% de acierto desde el triple, lejos del 37,7% que promedia a lo largo de su carrera en Euroliga. Pese a ello, sigue siendo una pieza intocable para Gordon Herbert y se las está ingeniando para aportar en otras facetas como el rebote –es el que más capturas acumula del equipo con 5,7 por choque– o las asistencias con una media de 2,4 para una valoración de 8,1 créditos.
Esto, unido a su experiencia e inteligencia sobre el parqué, lo convierten es el cuarto jugador que más minutos acumula de la plantilla bávara con 23:48 por encuentro. Allí donde ha jugado, ha sido importante y su labor lleva tiempo siendo reconocida también por la selección de Alemania, de la que lleva formando parte una década pese a la dura competencia y con la que terminó en cuarta posición en los pasados Juegos Olímpicos de París.
Sin ser la principal amenaza de un Bayern que cuenta con referentes como Edwards, Booker, Napier, Obst o Weiler-Babb, seguro que Voigtmann tiene un papel importante contra un Baskonia que deberá intentar sacar rédito de la superioridad física de sus interiores para hacer daño al internacional alemán, cuya misión será sacar a Hall, Diop, Moneke y compañía de la pintura.
