El Bitci Baskonia recibirá hoy a partir de las 17.00 horas la visita del San Pablo Burgos en un duelo que debería haber sido decisivo para las opciones gasteiztarras de entrar en la Copa del Rey, pero que, tras la dolorosa derrota del pasado miércoles contra el Río Breogán, tendrá como mayor aliciente el regreso de Landry Nnoko al Buesa Arena, ya que las opciones baskonistas de estar en Granada son mínimas. Para clasificarse, los de Spahija necesitan ganar hoy con cierto margen y que el Lenovo Tenerife pierdan al menos dos de los tres choques pendientes que le restan contra UCAM, Valencia Basket y San Pablo Burgos. Si pierde dos, alaveses y tinerfeños empatarían a victorias y el basket average -en estos momentos de +3 para el Baskonia y +16 para el Tenerife- dictaría sentencia, mientras que si pierde los tres y el Baskonia gana hoy, los azulgranas pasarían el corte directamente sin acudir al diferencial de puntos.

Se antoja difícil que suceda un hundimiento de ese calibre en el Tenerife, pero el Baskonia debería ir a por todas estas tarde para mantenerse con opciones y soñar. Y es que a los gasteiztarras les sobran motivos para intentar conseguir hoy una victoria. El Baskonia necesita levantar el ánimo tras dos semanas fatídicas en cuanto a resultados tras el pequeño parón obligado por el brote de covid-19 que vivió la plantilla. Desde entonces, el equipo ha perdido tres de los cuatro partidos oficiales que ha disputado y solo ha logrado imponerse por los pelos a un equipo de la parte baja de la ACB como es el Morabanc Andorra.

Por el camino se ha dejado prácticamente todas las opciones que tenía de estar en la Copa del Rey y en el play off de la Euroliga, generando cierto desapego en la afición, que dejó el Buesa Arena semivacío el pasado viernes en la visita del Bayern. Por ello, volver a la senda de la victoria y recuperar sensaciones contra el San Pablo Burgos en casa se antoja fundamental para abandonar la frustración reinante en Zurbano en estos momentos.

Ahora que el Baskonia ya no depende de sí mismo para entrar en la Copa del Rey, uno de los atractivos del encuentro será el regreso de Landry Nnoko al Buesa Arena, de donde salió por la puerta de atrás el pasado 4 de enero. Lo hizo después de que el club le abriera un expediente disciplinario por infringir el régimen interno de la entidad, que suposo su desconvocatoria en el duelo contra el Barcelona, el último antes del brote de covid-19 sufrido por el equipo.

Según destriparon posteriormente Chema de Lucas y la SER, la apertura del expediente se debió a la negativa de Nnoko a entrenar para forzar su salida del club, ya que estaba descontento con su rol, cada vez más secundario con la irrupción de Enoch y el desplazamiento de Costello al puesto de cinco. Además, tuvo un encontronazo con el segundo entrenador David Gil tras la dura derrota sufrida contra el Zaragoza el 28 de diciembre y al día siguiente decidió abandonar el grupo de Whatsapp de la plantilla y no acudir al entrenamiento. Así las cosas, el club rescindió su contrato y anunció su marcha rumbo al San Pablo Burgos con un frío comunicado.

Su estreno con la camiseta burgalesa se hizo esperar por los aplazamientos y el pasado martes disputó finalmente su primer encuentro con su nuevo equipo, partiendo como titular y registrando 6 puntos y 4 rebotes en la derrota contra el Darussafaka en Champions League. Dos días después, el jueves, se concretó la eliminación del vigente campeón del torneo en el tercer duelo de la repesca contra el Darussafaka, con 8 puntos y 5 rebotes del exazulgrana.

En el capítulo de ausencias, el Baskonia repetirá la convocatoria del viernes contra el Bayern, ya que Alec Peters es baja por covid-19 y su plaza de extracomunitario será cubierta por el otro Peters, Lamar, que se quedó en la grada en los dos compromisos anteriores de la ACB. Por parte del San Pablo Burgos, es duda la presencia del base Aleksej Nikolic, cuya participación se decidirá en el último momento, y podría darse el debut de Jarell Eddie, su último fichaje y un ala-pívot con buen cartel y experiencia en la NBA y en la Euroliga. Será también la primera ocasión en la que Paco Olmos, fichado del Breogán para intentar sacar al equipo de puestos de descenso, dirija al equipo en la competición doméstica.

El Baskonia mantiene una pequeña opción de entrar en la Copa si gana y el Tenerife pierde al menos dos de los tres choques que le restan

Nnoko dejó el Baskonia por la puerta de atrás tras abrírsele un expediente disciplinario por incumplir el régimen interno del club