Madrid. Este joven periodista barcelonés otorga un voto de confianza a un Baskonia en horas bajas.
¿Cómo prepara el comentarista de TVE esta Copa del Rey?
Hay que cuidar hasta el último detalle. Estoy más tenso que si fuera un partido de la ACB. Vamos a dar por primera vez los siete partidos por Teledeporte, conectando veinte minutos antes del primero y terminando veinte después del último. Además, hay que llenar mucho hueco porque no tenemos publicidad. Entre partido y partido, también emitiremos en directo durante 45 minutos. Estamos ensayando desde Navidades para que hoy -por ayer- no falle nada.
¿Se vuelca TVE con el baloncesto?
Sí, sin duda. Llevo años intentando desmitificar ese mito. Nos volcamos como nadie. Somos la única cadena que retransmite la ACB y la Euroliga. Cuando llegan acontecimientos importantes como la Copa o la Final Four, retransmitimos seis horas ininterrumpidas de baloncesto durante cuatro días. Algo de lo que no presumen otros.
¿Es posible que el baloncesto reste audiencia al fútbol?
Es una reflexión que me llevaría mucho tiempo explicarla. La gente que está dentro, por lo menos, le pone ganas. Lo que pasa es que hay que quitarse de la cabeza la idea de competir con el fútbol u otros deportes. Somos lo que somos, estamos contentos de estar aquí. Los que vemos el baloncesto, nos gusta el baloncesto. Los que trabajamos para el baloncesto es porque nos gusta el baloncesto. Ya está, no pasa nada si las audiencias son alguna vez bajas. Debemos estar contentos por llenar un pabellón como el Palacio de los Deportes. Habrá ocho aficiones apoyando a sus equipos, sin jaleos y todo va a funcionar bien. Somos la envidia de una competición organizada en toda Europa no sólo del mundo del baloncesto sino también de otros deportes. Debemos empezar a ser más positivos, no quejarnos tanto ni mirarnos en otros.
La experiencia de trabajar con Romay y Comas es...
Increíble. Se aprende un montón. He tenido la suerte de estar al lado de grandes comentaristas como Joan Creus, Rafa Vecina, Ferrán Martínez, Sergio Scariolo... Ellos no sólo saben de baloncesto sino que ven algo más que el espectador medio, que es lo que yo soy al final. Lo que debo hacer es callar la boca y abrir bien los ojos.
Seguir la estela de míticos comentaristas como Ramón Trecet o Pedro Barthe debe ser difícil, ¿no?
No lo sabes bien. Me falta mucho para ser como ellos. Ellos marcaron una época, estuvieron ligados al baloncesto en un momento que se produjo un boom en nuestro país. Sólo tengo 33 años. Ojalá algún día pueda estar el mismo tiempo que ellos narrando canastas. Cuando Pedro me dio la alternativa, recuerdo que me dijo que intentara hacerlo como yo supiera y sin intentar copiar a nadie para que las cosas me fueran bien. Trato de tener mi estilo propio y ser yo mismo.
¿Quién va a ganar esta Copa?
Es difícil dar un favorito. De todas las que he estado, sólo en la última de Bilbao ganó el claro favorito. Todo parece apuntar a una final Barcelona-Real Madrid, pero el año pasado también iba a ganar el conjunto catalán la Liga de calle y al final mira lo que pasó. No me olvido ni del Power Valencia ni del Blancos de Rueda, que está con la moral por las nubes. La Copa es la Copa.
¿Le otorga opciones al Baskonia?
Está más irregular que otros años, no nos vamos a engañar. Que nadie le subestime por el carácter del club y porque son jugadores que saben competir. Sergi Vidal me decía hace poco que la Copa es muy difícil y, al mismo tiempo, muy fácil porque sólo debes estar tres días bien.