Había muchas expectativas puestas para esta temporada en el Atlético de Madrid, próximo rival del Alavés en Mendizorroza. El conjunto del Cholo Simeone ha renovado su plantilla durante el mercado estival con un total de ocho nuevas incorporaciones, en las que el gasto supera ya los 175 millones sin contar los posibles bonus o condiciones que puedan aumentar la cifra en el futuro.

Álex Baena, Hancko, Raspadori, Johnny Cardoso, Ruggeri, Thiago Almada, Marc Pubill y Musso han sido las incorporaciones de un Atlético que además efectuó la opción de recompra sobre Mouriño en el Alavés para posteriormente venderlo al Villarreal.

Pese a todas estas incorporaciones en un equipo que de por sí ya era competitivo, Simeone no ha encontrado la fórmula en este arranque liguero para hacer funcionar a sus piezas y aterrizará el próximo fin de semana en Vitoria envuelto en serios problemas.

Tras un decepcionante Mundial de Clubes, en el que el conjunto colchonero quedó eliminado en la fase de grupos frente al PSG y Botafogo, ahora el Atlético encadena otra nueva desilusión en este inicio de Liga. 

A la derrota cosechada en la jornada inaugural en el feudo del Espanyol (2-1), se le sumó el sábado un nuevo varapalo con el empate a uno en casa ante el recién ascendido Elche de Eder Sarabia. 

De este modo, con tan solo un punto de seis posibles, Simeone ha registrado su peor arranque liguero con el Atlético en la 15º temporada al mando del equipo.

Por lo tanto, el Alavés pretenderá hurgar en la herida colchonera el próximo sábado en Mendizorroza, un estadio que además no es muy plácido para Simeone. En sus ocho visitas al templo babazorro como técnico rojiblanco, el argentino solo ha logrado tres victorias, otros tres empates y dos derrotas.

Además, en los últimos años parece que el Alavés le ha tomado el pulso en casa al equipo de Simeone y desde el 3 de enero de 2021 la escuadra madrileña no vence en Vitoria.

¿El ‘Cholo’, en el punto de mira?

El mal arranque del Atlético ha hecho levantar todas las miradas y dirigir las críticas principalmente al banquillo rojiblanco.

Simeone, con contrato hasta junio de 2027, acumula la friolera de 15 temporadas al frente del próximo rival del Alavés. Precisamente, el argentino llegó en diciembre de 2011 tras el mal arranque de un Atlético que ya venía de años atrás con una crisis institucional.

Simeone sustituyó a Gregorio Manzano en el banquillo rojiblanco con el objetivo de devolver al Atlético a la élite del fútbol europeo, objetivo que no tardó en conseguir. Desde invierno del 2011, Simeone ha logrado un total de ocho títulos con el Atlético (dos Ligas, dos Europa Leagues, dos Supercopas de Europa, una Supercopa de España y una Copa del Rey).

Lo cierto es que el entrenador del Atlético tiene una trayectoria casi impoluta en el conjunto rojiblanco. Sin embargo, todo hace indicar que su posición ni mucho menos está en entredicho ante el cariño que le muestra su afición casi a diario.

No obstante, con las expectativas cada temporada de pelear por títulos con Barcelona y Real Madrid, desde la temporada 2020-21 el palmarés permanece invariable para los rojiblancos.

Pese a todo, Simeone no es el único foco de posibles críticas en el Atlético ya que los nuevos fichajes de momento no han justificado su llegada durante las dos primeras jornadas.

Llegada a Vitoria

Dado que el mercado sigue abierto, no sería de extrañar la llegada de algún jugador más para rebajar tensiones en el conjunto rojiblanco. Nicolás González, extremo derecho argentino de la Juventus, puede estar al borde de llegar al Atlético, aunque su disposición para Mendizorroza sería una incógnita.

A día de hoy tampoco se sabe con total certeza si Álex Baena y José María Giménez, ambos lesionados y fuera del grupo de entrenamiento, podrán estar el próximo sábado en Vitoria. En principio, no volverán hasta después del parón.

Pese al mal inicio liguero de los colchoneros, el Alavés no se puede fiar de un conjunto siempre peligroso y que cuenta con varias caras conocidas como las de Marcos Llorente o Giuliano Simeone.

Los pupilos de Coudet afrontan el encuentro con la firme idea de lograr los tres puntos en casa y poder marcharse al parón de selecciones con seis de nueve en su casillero particular.