Duro final de año para el Deportivo Alavés. En una tarde muy accidentada, con Guridi, Sivera y Pica lesionados, los babazorros no fueron capaces de vencer a un Valencia contra quien se pusieron por delante hasta en dos ocasiones (2-2). Carlos Martín y Joan Jordán marcaron los goles visitantes que igualaron Rioja y Dani Gómez, este último ya en el dilatado tiempo de prolongación. Tercer empate para el Chacho Coudet

La alineación del técnico albiazul para el encuentro ante el cuadro che tuvo dos grandes novedades respecto al derbi con el Athletic. Debido a las bajas atrás, con Tenaglia y Mouriño fuera de la convocatoria, el argentino optó por introducir a Manu Sánchez y Pica, formando una línea de cinco en la retaguardia. Para ello, además, retrasó la posición de Carlos Vicente, quien arrancó de carrilero diestro, como ya había hecho otros días. 

Esa variante en el dibujo albiazul pilló por sorpresa al Valencia, y eso lo aprovechó perfectamente el Alavés. Lo hizo Carlos Martín en una jugada iniciada por Abqar. El marroquí desplazó en largo a la banda derecha, allí apareció Carlos Vicente para pisar el área che, y el centro raso del maño lo empujó el 15 a la red con ayuda de Foulquier (0-1, min. 8). El remate, eso sí, fue posible gracias a la prolongación de tacón de Kike García.

Tras el gol, los gasteiztarras no dieron tregua a los locales. Su dominio tanto con el balón como sin él fue notable y las gradas de Mestalla fueron mostrándose cada vez más nerviosas. Algo lógico teniendo en cuenta que el Glorioso pudo ampliar su ventaja. Hubo dos ocasiones claras para ello antes del descanso: una de Pica, cuyo disparo en un córner se marchó alto, y otra de Stoichkov. El intento de este lo tuvo que desviar Dimitrievski

Stoichkov, por cierto, había saltado al césped por Guridi, obligado a retirarse cerca del minuto 20 debido a un tirón muscular. Sin el de Azpeitia en la medular, el Alavés perdió acierto en las transiciones, pero ganó llegada al área rival. También se notó su ausencia en la presión alta, que había dado muchos frutos en los primeros compases. Lo cierto es que fue un alivio para el Valencia que el 18 albiazul no pudiera continuar.  

Aun así, fueron los babazorros quienes dominaron el encuentro hasta la recta final del primer tiempo. Su superioridad en las distintas fases del juego fue evidente, manejando cada espacio de forma notable, y también supieron defender en los últimos minutos. La línea de cinco atrás ayudó a reducir huecos y eso provocó que ninguno de los acercamientos del cuadro che pusiera en apuros a Sivera. Gran noticia, sin duda.

ALTIBAJOS EN LA SEGUNDA MITAD

El paso por los vestuarios, sin embargo, benefició al Valencia. Los de Rubén Baraja volvieron con otro espíritu al césped y, en apenas unos minutos, fueron capaces de crear mayor inquietud en el Alavés que en los primeros 45. Ahora bien, lo que preocupó a Coudet no fue el acoso inicial de los locales, sino la situación de su portero. Hugo Duro golpeó a Sivera en la mano y tuvo que entrar Owono para ocupar la portería albiazul.

Y no tuvo suerte. Owono derribó a Diego López en una mala salida y, tras revisar la acción en el VAR, Alberola Rojas señaló los once metros. Desde ahí, no falló Rioja (1-1, min. 70) y, una vez más, el Glorioso vio cómo su rival le castigaba por errores no forzados. Por si lo sufrido no era ya penitencia suficiente, también tuvo que retirarse lesionado Pica. Sedlar, Guevara (Stoichkov) y Conechny (Martín) fueron los tres últimos cambios.

Ninguno de esos golpes, eso sí, tumbó al Alavés. En una arrancada inesperada, Diarra llegó hasta el área rival y le sacó un penalti a Mosquera. Joan Jordán tampoco perdonó -su ejecución fue magistral- (1-2, min. 88) y solo quedaba aguantar para llevarse tres puntos importantísimos. No fue posible. Dani Gómez aprovechó un grave error atrás para volver a poner las tablas cuando corría el octavo de los once minutos de añadido (2-2)