La llegada de futbolistas cedidos a Mendizorroza se ha convertido en una práctica recurrente por parte de la dirección deportiva durante las temporadas en las que el Deportivo Alavés ha militado en la máxima categoría. Una fórmula de mercado que le ha permitido a la entidad vitoriana disponer de jóvenes prometedores que tratan de superar el peaje de la Primera División en Vitoria antes de regresar a sus equipos de origen.
Un claro ejemplo de ello son Marcos Llorente y Theo Hernández, quienes después de demostrar sus aptitudes durante un curso en el Alavés se han convertido con el paso de los años en piezas indispensables del Atlético de Madrid y el Milán respectivamente.
En la actualidad, el Glorioso cuenta como futbolistas cedidos a Samu Omorodion, Rafa Marín, Álex Sola, Ianis Hagi y Giuliano Simeone, quienes finalizan su vinculación con el Alavés el próximo 30 de junio.
Hasta la fecha, el protagonismo con la elástica albiazul de los jugadores en préstamo ha sido desigual. Entre los futbolistas con más minutos figuran los nombres de Samu Omorodion y Rafa Marín, dos noveles que han derribado definitivamente el muro de la máxima categoría. Ellos constituyen, sin lugar a dudas, las sensaciones más positivas del Deportivo Alavés en la temporada de su regreso a Primera División.
El ariete melillense acumula ocho dianas con el Deportivo Alavés y, como es lógico, su paso por Vitoria ha revalorizado con creces la apuesta de 6 millones de euros realizada por el Atlético de Madrid. Samu Omorodion ha demostrado ser un ariete de primerísimo nivel y, pese a que la entidad vitoriana esté predispuesta a repetir su cesión, el internacional con la selección española sub-21 regresará a su club de origen.
Alfonso Fernández de Trocóniz manifestó recientemente su deseo de que Omorodion continuase en Vitoria, pero reconoció al mismo tiempo que “no depende” de la entidad albiazul. “Es un magnífico jugador, pero no es nuestro. Al Deportivo Alavés le encanta tener a los mejores jugadores y Samu es un magnífico futbolista”, agregó el presidente albiazul durante la previa del último partido frente al Betis.
Además, el Atlético de Madrid quiere blindar a su joya tras las extraordinarias cifras firmadas en su primera experiencia en la máxima categoría. La cláusula de rescisión de Omorodion oscila entre los 80 y 100 millones de euros, una cuantía que puede quedarse corta siempre y cuando el delantero continúe con su progresión. En consecuencia de su brillante periplo en Vitoria, el punta melillense está llamado a formar parte del conjunto dirigido por el Cholo Simeone después del 30 de junio.
De menos a más
Rafa Marín es otro joven futbolista que se ha revalorizado gracias a la valiente apuesta del Deportivo Alavés. El conjunto vitoriano logró su cesión procedente del Real Madrid y el salto del central fue de dos categorías. Pasó de Primera RFEF a Primera División en cuestión de meses. Una auténtica prueba de madurez que, de momento, se ha saldado con nota por parte del zaguero sevillano.
Al igual que Omorodion, Marín ha cometido algún error propio de la inexperiencia en su proceso de adaptación a la máxima categoría. Algo que forma parte del desarrollo natural de un jugador de tan solo 21 años. Tras la desafortunada baja de Aleksandar Sedlar, un mariscal en el eje de la zaga, Rafa Marín ha mostrado sus credenciales de ser un defensa más que apto para el fútbol de primer nivel.
Más allá de sus notables estadísticas (3,5 recuperaciones por encuentro), el sevillano transmite liderazgo en defensa y serenidad en la salida de balón. Dos cualidades demandadas por Luis García y que, desde luego, están dejando un gran sabor de boca en su club de origen.
El Real Madrid tiene el ojo puesto constantemente sobre Rafa Marín, quien también regresará al conjunto blanco al término de la presente campaña y se postula como el relevo generacional de Nacho Fernández, con contrato en vigor hasta el 30 de junio de este 2024.
Álex Sola también es otro cedido que está siendo protagonista en los esquemas de Luis García. El donostiarra ha recuperado en este último mes la chispa en los metros finales y, junto a Omorodion, es uno de los mayores generadores de peligro en el área rival.
El propio jugador de Donosti, en una entrevista con este periódico, admitió que “el Alavés me está dando la confianza que necesitaba y en la Real no me sentía futbolista”, pero recordó al mismo tiempo que su contrato le obliga a regresar a tierras guipuzcoanos. En el caso de Sola, pueden existir más opciones de que siga a partir de la próxima temporada teniendo en cuenta el overbooking de la Real en su puesto (Traoré, Odriozola y Aramburu).
En definitiva, el Deportivo Alavés ha dado la tecla en este curso con los futbolistas cedidos que han dado un plus al equipo de Luis García. Además de las notables irrupciones de Samu, Marín y Sola, el Glorioso guarda en la recámara los nombres de Simeone y Hagi, quienes aguardan pacientemente la oportunidad de demostrar todo su potencial. El ítalo-argentino sigue en un segundo plano tras la terrorífica entrada de Matos en Briviesca, mientras que el rumano ha estado muy por debajo de las expectativas cada vez que ha recibido la alternativa.
