La irrupción de Kike García tuvo un impacto muy grande en el Deportivo Alavés. A las pocas horas de anunciarse su fichaje, el ariete manchego debutó en el Nuevo Mirandilla como albiazul y solo unos días después, en el estreno liguero en Mendizorroza, conquistó a la grada gasteiztarra con sus dos goles al Sevilla, además de su derroche físico. Algo que, claro está, también convenció a Luis García, quien le mantuvo en el once en las siguientes citas.

No obstante, hay una joven promesa que, con el paso de las jornadas, ha ido ganándole terreno al veterano 'obrero del gol', hasta el punto de poner en duda su hegemonía en la punta de lanza. Su nombre es Samu Omorodion, aunque ya todo el fútbol español le conoce, y el pasado domingo, en La Cerámica, ofreció una actuación excelente. Se podría decir, incluso, que fue el mejor jugador del partido, aunque con el permiso del inigualable Jon Guridi. 

Frente al Villarreal, el delantero melillense disfrutó de su segunda titularidad con el Alavés y él solo, gracias a su fortaleza en las disputas y velocidad al espacio, se bastó para poner en jaque a la retaguardia groguet, formada por tres centrales de garantías como Cuenca, Albiol y Mandi. Además, marcó un gol, le anularon otro y estuvo cerca de conseguir un tercero antes de ser reemplazado por el propio Kike en la recta final de la contienda.

Con esa actuación en el feudo amarillo, Samu demostró que las buenas sensaciones de sus primeras apariciones, como revulsivo, no habían sido pura casualidad. Debutó ante el Getafe en el Coliseum y ya aquel día pudo verse que, con minutos y confianza, podría ser importante para el Glorioso, si bien no era sencillo prever que alcanzaría tan pronto el nivel necesario para restar protagonismo al nueve manchego y hacerse con la titularidad.

Ya avisó de esto último, eso sí, la primera vez que formó parte del once inicial. En Balaídos, contra el Celta, estrenó su cuenta goleadora como babazorro y silenció así los murmullos por su falta de puntería, ocasionados tras algunos errores en sus anteriores participaciones. Esa fue, cabe recordar, su segunda diana de la temporada, pues ya le marcó al Atlético de Madrid, con el Granada, en la jornada inicial del campeonato liguero. 

Lo positivo, en la línea de lo anterior, es que nada hace pensar que Samu haya alcanzado su tope. Si consigue afinar ciertos detalles, como entender mejor qué le puede ofrecer cada compañero, su paso por Vitoria-Gasteiz puede ser muy productivo tanto para el Alavés, que tendrá más opciones de lograr la permanencia en Primera División, como para el club colchonero, quien abonó su cláusula tras el mencionado duelo ante los nazaríes. 

Kike García celebra uno de sus dos goles frente al Sevilla. AFP7 vía Europa Press

De momento, la principal certeza es que el debate por la punta de lanza babazorra está más abierto que nunca. Visto lo visto en La Cerámica, y teniendo en cuenta que Luis García es partidario de dar continuidad a los buenos momentos de forma, no sería extraño ver al melillense mantener la titularidad. Sobre todo, tras comprobar que no le ha afectado la odisea de este último verano, durante el que ha intercambiado ciudades como si fueran cromos. 

Sea como fuere, esa pugna por el puesto de nueve es una gran noticia para el Glorioso. Y ya no por el hecho de mantener a ambos a un nivel óptimo, que también, sino porque cada uno aporta beneficios distintos al equipo, permitiendo al entrenador babazorro alinear a uno u otro dependiendo de las características del rival. Del mismo modo sucede, por ejemplo, en el centro del campo con hombres como Antonio Blanco o Carlos Benavídez.

SAMU, DISPONIBLE ANTE EL ATLÉTICO

Tal y como manifestó el director deportivo albiazul, Sergio Fernández, en el día de su presentación como nuevo futbolista del Alavés, Samu Omorodion podrá jugar este domingo frente al Atlético de Madrid. El acuerdo por la cesión del delantero melillense no incluye la popular cláusula del miedo y, al contrario que en otras ocasiones, Luis García Plaza no tendrá ningún problema para alinear a uno de sus pupilos frente al club que posee sus derechos. Si el técnico madrileño decide mantener a Samu en el once, será su tercera titularidad de la presente campaña, todas ellas a domicilio. Lo fue también contra el Celta en Balaídos y el Villarreal en La Cerámica.

EL TERCERO EN DISCORDIA

Quien, al menos de momento, parece estar fuera de esa disputa por la titularidad es Jon Karrikaburu. Aunque se preveía que su participación iba a ser menor a la de los citados Samu y Kike, lo cierto es que está teniendo aún menos oportunidades de las que se esperaban. Desde que llegó cedido al Alavés procedente de la Real Sociedad solo ha jugado 14 minutos, y siempre con el partido cuesta arriba (Rayo Vallecano y Osasuna).

Aun así, cabe mencionar que Luis García tiene muy buena opinión de Karrika. Dentro del club se le considera como el mejor goleador del equipo y, en varias de sus comparecencias, el técnico albiazul ha manifestado que está muy satisfecho con su trabajo del día a día. Habrá que ver si en la Copa, donde los gasteiztarras arrancarán frente al Deportivo Murcia, disfruta y aprovecha la oportunidad que se está ganando en Ibaia.

Karrikaburu, durante el duelo entre el Rayo y el Alavés en Vallecas. Alavés