El último jugador en sumarse al baile de nombres del Deportivo Alavés es, al igual que Sergio Arribas, un viejo anhelo de la secretaría técnica encabezada por Sergio Fernández. Se trata, en concreto, de Andrei Ratiu, quien, según el periodista Matteo Moretto, se ha convertido en el principal objetivo del conjunto babazorro para reforzar su lateral derecho.

Ratiu, de 25 años, pertenece al Huesca, lo que obligará al club babazorro a negociar, y es internacional absoluto con Rumanía. Allí, en El Alcoraz, ha sido titular indiscutible esta última temporada, en la que ha disputado 39 partidos –uno de ellos en Copa–, y se ha consagrado, a las órdenes del Cuco Ziganda, como uno de los mejores carrileros de la categoría de plata.

No es la primera vez, como se ha adelantado, que el Alavés muestra interés por el lateral rumano. Ya en su época en el Villarreal, donde terminó su formación tras pasar por el Andorra aragonés, Sergio Fernández barajó su nombre. Posteriormente, defendió el escudo de ADO Den Haag neerlandés, en calidad de cedido, y acabó fichando en propiedad por la escuadra oscense en el verano de 2021.

Si el club albiazul consigue cerrar la incorporación de Ratiu, se hará con los servicios de un futbolista que ha demostrado estar de sobra capacitado para dar el salto a la máxima categoría. Aún tiene margen de mejora, lo cual siempre es positivo, y destaca por su capacidad para aportar al equipo tanto en la faceta defensiva como ofensiva del juego. Sube y baja la banda como muy pocos.

Es digno de mención, eso sí, que el Villarreal podría entrometerse en las negociaciones. Al facilitar su llegada al Huesca, la entidad groguet se reservó una opción de recompra y si esta se ejecutase, que no sería nada descabellado, el Glorioso se vería obligado a acudir a La Cerámica, como ya ha hecho alguna que otra vez en los últimos años (Iván Martín, Alfonso Pedraza, etcétera).

Por otro lado, el mero hecho de que cada vez se relacionen a más laterales diestros con el Alavés dice mucho sobre la situación del fichaje de Nahuel Tenaglia. Aunque el club gasteiztarra, tal y como admitió el propio Sergio Fernández hace unos días, quiere que el argentino siga en Vitoria-Gasteiz, la realidad es que las conversaciones con Talleres, dueño de sus derechos, no están siendo tan sencillas como se esperaba.

En relación con lo anterior, también queda pendiente el caso de Anderson Arroyo. Cedido por el Liverpool, y sin demasiadas oportunidades con Luis García, la escuadra albiazul sigue pendiente de aclarar una de las cláusulas presentes en su contrato, mediante la cual la entidad inglesa está tratando que el Glorioso, como consecuencia del ascenso a la élite, aborde su fichaje en propiedad.