Jugar la vuelta en Mendizorroza –sobre todo, después de haber cosechado un buen empate en Ipurua– hace que el Deportivo Alavés sea ligeramente favorito en esta primera eliminatoria del play off de ascenso. Ahora bien, eso no quiere decir que los pupilos de Luis García Plaza puedan confiarse en el segundo partido, pues, pese a que la mayoría de precedentes protegen su posición, también los hay algunos que juegan en favor del Eibar

Desde que se instauró el actual sistema de promoción, en la campaña 2010-11, ha habido nueve semifinales en las que, al igual que el sábado en el feudo armero, el encuentro de ida acabó en tablas. Lo positivo, en relación con el Glorioso, es que en seis de ellas fue la escuadra visitante la que, ya en su feudo, terminó llevándose la eliminatoria, demostrando así que contar con el factor campo es más importante de lo muchos piensan.

Para conseguir esa clasificación a la gran final por el ascenso, cuatro –Valladolid (2011-12), Almería (12-13), Girona (12-13) y Getafe (16-17)– de los seis ganaron el choque de vuelta. Es decir, solo dos, Alcorcón (11-12) y Las Palmas (14-15), pasaron por medio de un segundo empate. La diferencia es que, en la mayoría de esos casos, aún se tenía en cuenta el valor doble de los goles fuera de casa, lo que obligaba muchas veces a plantear todo de distinta forma.

Por el contrario, los precedentes que favorecen al Eibar son tres. Tanto el Real Murcia (2013-14) como el Real Zaragoza (17-18 y 19-20) tuvieron en su día la oportunidad de cerrar el pase a la final del play off en su feudo y la desaprovecharon. Tras el empate en el encuentro de ida, el Córdoba fue quien asaltó la Condomina, mientras que el Numancia y el Elche hicieron lo propio con La Romareda para colarse en la eliminatoria decisiva.

Jason disputa un balón con Tejero durante el Eibar-Alavés en Ipurua. Javier Colmenero

LA GRAN FINAL

Si el Alavés, del mismo modo que hicieron la mayoría de los clubes mencionados, consigue imponer la lógica, todo hace pensar que se medirá al Levante en la gran final por el ascenso a Primera División. En ese caso, el factor campo –y la posibilidad de subir por medio del empate en el cómputo global– pasaría a los granotas, cuya victoria ante el Real Oviedo en la última jornada fue suficiente para escalar hasta la tercera posición de la tabla. 

Los pupilos del exalbiazul Javi Calleja dieron la sorpresa en el Carlos Belmonte, donde lograron una renta de dos goles (1-3), y confían en que no suceda ninguna catástrofe este miércoles en el Ciutat de València. Habrá que ver si, en el caso de volver a encontrarse, los babazorros pueden ofrecer dos actuaciones mejores de las que se vieron en el campeonato regular. Los de Orriols fueron superiores tanto en la primera como en la segunda vuelta.