Luis García no acabó del todo satisfecho pese a los tres puntos en el zurrón. “Se ha ganado la semifinal, aunque hemos sufrido mucho. Estuvimos espesos y nerviosos con balón. Quisimos tener el control de la pelota con nuestros jugadores de calidad, pero no pudimos. Tuvimos opciones para matar el partido en algún contragolpe, entonces ellos nos han metido un golazo. Somos un equipo mentalmente fuerte. La afición es una locura, la mejor afición de Segunda. Es un lujo jugar aquí”, señaló.
Tras criticar que “estuvimos espesos e imprecisos fallando pases fáciles aunque buscamos gente que nos diera seguridad con la pelota”, se congratuló por jugar “más profundo” tras el descanso. “Al Málaga le podíamos hacer daño al contragolpe y tuvimos ocasiones clarísimas para el 2-0. El equipo al final se fue arriba, debíamos haber ganado más tranquilos”.
El madrileño alabó que “mentalmente el equipo está bien”, precisó que Villalibre hizo su mejor partido hasta ahora y también puso en su justa medida la capacidad de reacción de los suyos.
“Los tres últimos partidos se han complicado pero el equipo ha demostrado que cree en lo que hace. Son un grupo de chicos que nos han dado muchas alegrías y a ver si nos llevamos la gran alegría. Debíamos ganar este partido por nosotros, por nuestras familias y por esta afición que se merece todo”, avisó.
Su mirada ya está enfocada en la final del próximo sábado. “El Las Palmas lo tiene más fácil que nosotros pero somos capaces de liarla. Les vale el empate pero iremos a por todas. Tendremos que saber gestionar el partido y la gonía de estas jornadas nos puede servir. Es un todo o nada, pero es una oportunidad muy bonita, Jugamos para hacer feliz a mucha gente. Ojalá lo consigamos. aunque partimos con desventaja. Espero que no nos dominen los 90 minutos y haya alternancia. Ellos tienen pegada y calidad individual”.
