Vitoria - A Abelardo se le presenta un problema grave en su alineación de cara al trascendental encuentro de mañana contra el Leganés, en el que el Deportivo Alavés quiere dar un nuevo paso de gigante hacia la permanencia. Una de las demarcaciones que más problemas ha generado en el seno del equipo a lo largo del presente curso ha sido el lateral izquierdo, demarcación por la que han transitado distintos jugadores hasta que Rubén Duarte ha conseguido apoderarse de la titularidad hasta ofrecer un buen rendimiento en los últimos compromisos. El almeriense fue expulsado ante el Sevilla y no podrá ser de la partida mañana, por lo que el preparador gijonés tiene que encontrar una solución de emergencia para tapar el socavón, ya que la dirección deportiva tampoco ha sido capaz de concretar hasta la fecha un deseado fichaje para contar con dos piezas específicas en esa posición.

Duarte llevaba como titular los siete últimos partidos -el último que dirigió De Biasi y toda la etapa de Abelardo- después de apenas haber entrado en el equipo en la fase anterior -solo apareció en tres de los doce primeros encuentros ligueros- y en esta fase el andaluz se había asentado tras un arranque de curso complicado en el que, como todo el grupo, rindió muy por debajo del nivel esperado. Como les ha pasado a muchos jugadores, la mejoría del colectivo le ha beneficiado en el plano individual. Sin ir más lejos, y pese a su expulsión, ante el Sevilla firmó una actuación muy solvente y se encontraba ya perfectamente acoplado en los engranajes del grupo.

La roja que vio el único lateral izquierdo específico le obliga a Abelardo a buscar una alternativa por primera vez desde su llegada. Con Héctor Hernández ya en la fase final de su recuperación -se estima que pueda regresar en aproximadamente un mes- y sin llegar aún ese lateral izquierdo que con tanta insistencia se ha buscado en el mercado invernal -se mantiene abierta la opción de Miguel Layún, pero sigue estando muy difícil-, toca de nuevo reconvertir a un jugador a dicha demarcación porque en la plantilla no hay más alternativas.

Hasta cinco alternativas Nada nuevo bajo el sol, ya que eso de adaptar a un futbolista al lateral zurdo viene siendo una constante desde el arranque del curso. Así lo hizo Luis Zubeldía con Alfonso Pedraza, situación que también se repitió con un De Biasi que también usó ahí a Wakaso. Y hasta el propio Abelardo ha hecho sus experimentos con la Copa como banco de pruebas, otorgando la titularidad en esa demarcación ante Formentera y Valencia a un Adrián Diéguez que también fue expulsado el pasado miércoles en Mestalla.

La decisión que el técnico asturiano vaya a tomar de cara al partido de mañana es una incógnita, ya que todas las soluciones presentan pros y contras y también pueden mediatizar la composición de otras demarcaciones del campo.

La reconversión de un central al lateral ha sido el método usado en la Copa ubicando a Diéguez en la banda izquierda. El madrileño podría ser el recambio de nuevo de Duarte o bien se podría apostar por un Alexis que ha ido pasando por todos los puestos del entramado defensivo y solo le falta aparecer por ese costado. En todo caso, son jugadores que no están acostumbrados a esa demarcación, que pueden sufrir bastante fuera de su sitio habitual y que ofensivamente dejan ese flanco bastante cojo.

Con la recuperación de Carlos Vigaray, se abre la puerta a que el madrileño pueda cambiar de su banda habitual, la derecha que ya es propiedad indiscutible de Martin Aguirregabiria, al otro costado. El problema en su caso es de falta de ritmo competitivo tras más de un mes de baja, aunque por perfil sería el que mejor encajaría y ya ha jugado algunas veces en esa posición.

Como solución de emergencia, Wakaso ya sabe lo que es jugar como lateral y ya acabó el partido ante el Sevilla en esa posición. El ghanés ofrece despliegue físico y puede recorrer la banda sin problemas, pero defensivamente no aporta una gran seguridad. Por si fuera poco, la más que probable ausencia de Manu García podría llevar a Abelardo a utilizar al africano en su posición natural formando pareja en el doble pivote con Tomás Pina.

La última alternativa la representa un Pedraza que comenzó la temporada en esa posición y que es el albiazul más utilizado hasta la fecha como lateral izquierdo. El cordobés también aporta un amplio recorrido por el carril, pero defensivamente flojea y se perdería al mismo tiempo su presencia en una zona del campo más adelantada donde es un jugador mucho más peligroso y útil al rendimiento del equipo.