Vitoria. Su currículo desde que tomó las riendas del Deportivo Alavés hace ya nueve jornadas permanece inmaculado con un excelente balance de seis victorias y tres empates y se ha convertido en un auténtico especialista en recolectar valiosos puntos en los instantes finales de las contiendas. Ayer volvió a demostrarlo en el derbi frente al Sestao en el que, pese a no ofrecer un juego demasiado vistoso, consiguió que sus jugadores se hicieran con el triunfo merced a los dos goles anotados en el epílogo del mismo. Precisamente esa circunstancia, la de perseguir el éxito hasta los instantes finales, fue la que quiso destacar Iñaki Ocenda en su valoración de lo sucedido sobre el césped de Mendizorroza. "Me doy por satisfecho porque el equipo pelea hasta el final y demuestra que está preparado para ganar hasta el último minuto", significó.

En cualquier caso, el preparador albiazul no quiso ocultar tampoco que la actuación de ayer no pasará precisamente a la historia de las páginas más brillantes del balompié. Sin embargo, en estos momentos la eficacia y el pragmatismo están muy por encima de cualquier otro cosa y eso es entre otras cosas lo que ha permitido a la escuadra del Paseo de Cervantes asaltar la tercera plaza de la tabla clasificatoria, algo que se antojaba una absoluta quimera hace apenas unas jornadas. En este sentido, el entrenador alavesista quiso recordar las advertencias que había lanzado en la jornada previa al choque de ayer y que el Sestao iba a ofrecer muchas dificultades teniendo en cuenta que se encuentra con el agua al cuello y se está jugando la permanencia en Segunda División B en cada compromiso.

"Los partidos hay que trabajarlos hasta el final y teníamos enfrente un adversario en una situación muy complicada que ha puesto sus armas sobre el césped de Mendizorroza. Los rivales también juegan, todo el mundo aprieta y no es fácil ganar a nadie por mucho que se encuentre en problemas en la parte baja de la clasificación", resumió Iñaki Ocenda.

Echando ya un poco la vista frente, el técnico albiazul se congratuló de que la excelente trayectoria que está firmando el equipo desde que él tomó las riendas del mismo le haya permitido asentarse en los puestos de play off y disfrutar de "un pequeño colchón de puntos" con el que mitigar los posibles errores que pudieran producirse en las seis jornadas que restan para la conclusión de la temporada regular. En este sentido, Ocenda reconoció que la próxima semana -en la que el Alavés se medirá por este orden a Mirandés, Palencia y Ponferradina- será una exigente piedra de toque para sus discípulos. "Tenemos por delante unos partidos de dificultad extrema", reconoció.

Del Barrio, indignado La otra cara de la moneda la personificaba el entrenador del Sestao River, Alfonso del Barrio, que cargó con enorme virulencia contra el colegiado del encuentro que, bajo su punto de vista, resultó "determinante" en la resolución del encuentro. El técnico verdinegro consideró que el catalán Medié Jiménez perjudicó gravemente a su equipo en la no señalización de un posible penalti de Morcillo, la expulsión de Paredes y al no pitar una posible falta albiazul en el gol de Arriaga, por lo que habló de "atraco" y "robo".