Ambientazo asegurado para el derbi entre el Deportivo Alavés y el Athletic de este domingo (16.15 horas). A falta de todavía tres días para la importante cita, Mendizorroza se acerca a un lleno que, de producirse, sería el primero de la temporada vigente. Cerca estuvo de darse, e incluso se puede considerar como oficioso, en la visita del Barcelona, cuando se registraron 19.468 aficionados en las gradas del Paseo de Cervantes

Contra la escuadra rojiblanca, precisamente, ya se colgó el cartel de “no hay billetes” el curso pasado. Durante el mismo, que fue el del regreso a la máxima categoría, hubo un total de cuatro llenos, añadiendo los producidos contra Osasuna, Barça y el Real Madrid. La diferencia, eso sí, es que esta campaña se ha llegado al límite de abonados: un total de 17.800 que ha obligado a crear una lista de espera para los nuevos y futuros interesados. 

UNA MEDIA DE 17.144 ESPECTADORES

En lo que va de temporada, el Alavés ha disputado siete partidos en Mendizorroza y ha registrado una media de 17.144 espectadores. Es decir, un porcentaje de ocupación del 86,4 % que solo superan siete estadios de LaLiga: San Mamés (91 %), Vallecas (90,6 %), Balaídos (90,2 %), Santiago Bernabéu (89.4 %), Montilivi (87,7 %), Anoeta (87 %) y Mestalla (86,5). El RCDE Stadium (57,3 %), Coliseum (62,9 %) y Gran Canaria (75,2 %) están a la cola.

La visita del Barça, como se ha mencionado, ha sido la que mayor asistencia ha ocasionado en el Paseo de Cervantes y, por detrás, están las expediciones del Mallorca (17.212) y el Real Valladolid (16.904), siendo el duelo contra Las Palmas el menos popular (16.386). Algunos horarios no han sido buenos para la afición, pero resulta sorprendente que solo se haya superado la barrera de los 17.000 en dos ocasiones hasta el momento.

VARIOS PARTIDOS IMPORTANTES

No es menos cierto que aún faltan rivales de calado por pasar por Mendizorroza. Aparte del Athletic este domingo, el Alavés deberá recibir al Real Madrid, Real Sociedad, Atlético y Osasuna, todos ellos en la segunda vuelta. Además, es en la recta final del curso cuando los números aumentan dada la relevancia de cada encuentro, pues nadie quiere dejar solo al equipo en las finales por la permanencia u otros objetivos.