El BOE (Boletín Oficial del Estado) ya ha publicado la resolución del Ministerio para la Transición ecológica y el Reto demográfico respecto a la declaración de impacto ambiental del Estudio informativo de la integración del ferrocarril, nombre técnico que define la propuesta de soterramiento del TAV (Tren de Alta Velocidad) a su llegada a Gasteiz.
Si bien ya se sabía el cariz del documento, ahora se ha conocido el detalle las medidas que tendrán que implementar los rectores de la infraestructura para remediar los problemas que generarán las obras en materia de ruidos, vibraciones y una eventual incidencia sobre los acuíferos.
En concreto, la resolución datada el 4 de marzo y firmada por la Dirección general de Calidad y Evaluación ambiental del citado ministerio, a la que ha tenido acceso DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, recoge la declaración de impacto ambiental para los tramos de llegada y salida del tren de alta velocidad en Vitoria, que prevé problemas de ruido, para los que aconseja instalar pantallas de cuatro metros de alto, y mantas antivibraciones para proteger a los edificios.
El documento confirma que el tramo 1 se ejecutará entre pantallas desde el entorno de Crispijana hasta el cruce sobre el río Errekaleor.
Para el tramo 2, desde el final del tramo 1 hasta la conexión con el tramo Arrazua/Ubarrundia-Legutiano de la Y vasca se opta por la alternativa que discurre por el lado este de la academia de Arkaute.
La importancia de los ruidos
Respecto a los ruidos que generarán los convoyes a su llegada a Gasteiz y en la salida de la ciudad, el documento de impacto ambiental publicado propone propone instalar 12 pantallas acústicas de una altura de cuatro metros, más otras seis en Arkaute.
Este tipo de afección se sufrirá especialmente en los barrios de Salburua y Zabalgana, donde el tren no estará soterrado. Pese a la trascendencia que tendrá ese tipo de problema, el estudio ambiental hace especial referencia sobre las vibraciones.
De hecho, alerta de un “impacto severo” y propone que se vigilen los edificios con sótano a menos de 500 metros de la zona. Para solucionarlas, insta a usar “mantas antivibratorias” en kilómetro y medio, en seis tramos del trazado.
Por último, también advierte de que el tren puede impactar en el acuífero subterráneo de Vitoria, que podría subir su nivel en una parte y descender en otra. Para paliarlo, propone crear unos sifones.
LOS TRAMOS ANALIZADOS, AL DETALLE
- Tramo 1: Acceso a Vitoria. Comprende desde el punto de inicio en el entorno de Crispijana hasta el cruce sobre el río Errekaleor.
- Se han planteado dos alternativas con idéntico trazado, siguiendo el corredor actual, que difieren en el procedimiento constructivo y el método de reposición del flujo de agua subterránea, optándose por la construcción entre pantallas.
- Tramo 2: Nudo de Arkaute. Da continuidad al tramo 1 hasta su conexión con el tramo Arrazua/Ubarrundia-Legutiano de la Y vasca.
- En este tramo se plantearon dos alternativas de trazado, una que pasa al Oeste de la academia de Arkaute y sobre el extremo del parque de Salburua y la otra que discurre al Este de la academia, optándose por esta última.
- El nudo de Arkaute es un conjunto de ramales que aseguran la conexión entre los distintos trayectos ferroviarios en el entorno de Vitoria y, de manera específica, la continuidad entre la línea de alta velocidad Burgos-Vitoria, en fase de redacción de los proyectos, y las infraestructuras de la Y vasca, que se encuentran en un avanzado grado de ejecución.