9.875 alaveses están a la espera en el Servicio vasco de Vivienda (Etxebide) de un piso de alquiler protegido con el objetivo de poder afrontar una renta mensual más asequible. En total, en Euskadi hay 57.290 solicitudes de este tipo y la cifra alavesa supone un 17,2% de las mismas, según destaca el último informe Situación de las personas y familias que demandan vivienda protegida en alquiler en Etxebide, tras una encuesta realizada a 4.790 personas en febrero.

Como concluye dicho estudio, “buena parte del reducido parque de alquiler libre y protegido de Euskadi” está actualmente ocupado por personas y familias que manifiestan dificultades para poder asumir el pago de la renta libre, al tener que afrontar “un esfuerzo excesivo” para el pago de la vivienda, por lo que solicitan a Etxebide una protegida en alquiler. De hecho, el estudio observa un patrón estructural que se produce de forma simétrica en el conjunto de Euskadi: el de la necesidad de un alquiler más barato al actual. Así, al menos, es el motivo que han aducido el 61,8% de los apuntados en Álava a Etxebide.

Emancipadas

Otro de los resultados más relevantes “y que se viene constatando en los últimos años” es que a la espera de que se les adjudique una vivienda protegida de alquiler, la gran mayoría se encuentra ya emancipada en una libre.

En Álava, precisamente, resulta superior el peso relativo de esas personas y familias que ya están en el mercado libre de alquiler mientras esperan la adjudicación, al representar el 83,5% de solicitudes. En cambio, en Gipuzkoa y Bizkaia alcanzan el 75,6% y el 78,9%, respectivamente. En el caso alavés, se trata, en el 27% de los casos, de parejas o matrimonios que tienen hijos, de ahí la urgencia de esa mudanza.

Estas diferencias resultan más significativas en las tres capitales, dado que en Vitoria-Gasteiz asciende al 83,3%, el porcentaje de personas y familias emancipadas y que están inscritas en Etxebide, el mayor de las tres capitales, en comparación con Donostia (72,2%) y Bilbao (79,3%).

Si bien, todas las que se han emancipado pero siguen en las listas del Servicio vasco de Vivienda tienen en común, como agrega el informe, un nivel de ingresos medio “muy reducido”, al situarse en 1.361 euros al mes (1.269 euros mensuales en Álava). En la hipótesis de 14 pagas, la renta anual de las unidades de convivencia apenas supera los 19.000 euros netos anuales. Y el ingreso medio neto de los que comparten una vivienda en la que alquilan una habitación, apenas supera los mil euros mensuales “lo que le sitúa en una situación efectiva muy cercana a la exclusión residencial”.

Este bajo nivel de renta de las personas y familias emancipadas dificulta la sostenibilidad económica que tienen para pagar el alquiler de una vivienda libre (658 mensuales de promedio, siendo de 644,31 euros mensuales en Álava) o de una habitación (339 euros mensuales es el promedio en Euskadi y 330,54 euros/mes el de este territorio).

De este modo, las unidades de convivencia en una vivienda libre destinan de media en Euskadi el 39,1% de los ingresos a sufragar el alquiler (el 36,7% en Álava). En las capitales ese esfuerzo financiero es superior, aunque sobresale Bilbao donde se alcanza el 44%, seguida de Donostia y Vitoria, con un 38,8% y un 37%.

Pese a ello, el nivel de cobertura del sistema de ayudas y prestaciones sobre estas personas y familias inscritas en Etxebide es muy elevado. No en vano, un total de 26.900 unidades de convivencia recibe en Euskadi algún tipo de prestación, o lo que es lo mismo el 47% de los inscritos y el 58,5% de los que están emancipadas en una vivienda en alquiler libre. En Álava, la cobertura de ayudas llega a 5.048 familias (el 58,9%)

Sin emanciparse

En cuanto a los apuntados y que no se han emancipado, el informe dice que su situación “resulta también precaria”, tras un ingreso mensual neto en Euskadi de 1.287,7 euros, siendo más bajo en Álava (1.142,2 euros).

A la hora de concretar el precio del alquiler máximo que podrían afrontar, lo sitúan por debajo de 400 euros mensuales (381,9 euros en Álava), “lo que supone una llamada al fortalecimiento de las políticas de vivienda de fomento del alquiler asequible como uno de los retos estratégicos de la política vasca”.

Por todo ello, el Gobierno Vasco para los próximos años plantea una “apuesta decidida” por incrementar el parque de vivienda en alquiler asequible. Para ello, el Plan Director de Vivienda 2021-2023 incorpora estrategias y medidas que tratan de fomentar el alquiler social a un precio asequible. Asimismo, el Pacto Social por la Vivienda a 2036 se propone como objetivo duplicar el parque de viviendas en alquiler protegido, para pasar a 50.000 viviendas de oferta pública de alquiler asequible sobre el millón de viviendas principales previstas para 2036. l

El informe

Solicitudes de alquiler protegido. En Etxebide figuran 9.875 en Álava (17,2%), mientras que en Bizkaia hay 29.360 (51,2%) y en Gipuzkoa 18.055 (31,5%). En cuanto a las capitales, en Vitoria hay 9.371 (28%), en Bilbao constan 15.427 (46,1%) y en Donostia, 8.698 (26%).

Muestra. El número total de respuestas recibidas para este estudio titulado Situación de las personas y familias que demandan vivienda protegida en alquiler en Etxebide fue de 4.790, “lo que ha permitido que se pueda alcanzar un nivel de análisis muy detallado que ha posibilitado ofrecer datos para las tres capitales vascas además del análisis por territorio histórico”. En concreto, 653 pertenecen a Álava, 1.640 a Gipuzkoa y 2.497 a Bizkaia.

Conclusiones. Uno de los resultados más relevantes del estudio se asocia “y que se viene constatando en los últimos años” es que la gran mayoría de las personas y familias inscritas en Etxebide que solicitan una vivienda en alquiler protegido se encuentran ya emancipadas en una vivienda de alquiler libre. El 78,7% del total de las que están inscritas y siguen necesitando una vivienda protegida residen o bien en una vivienda en alquiler libre (53,7%) o en una habitación alquilada compartiendo piso con otras personas o familias (22,4%). Adicionalmente, un 2,6% se encuentra en una vivienda cedida.

Renta de las personas emancipadas. El nivel de ingresos medio de los hogares conformados por estas personas y familias emancipadas que siguen inscritas en Etxebide es muy reducido, se sitúa en 1.361 euros al mes (1.269 euros al mes en Álava). En la hipótesis de 14 pagas, la renta anual de las unidades de convivencia apenas supera los 19.000 euros netos anuales. El ingreso medio neto de las unidades de convivencia que comparten una vivienda en la que alquilan una habitación apenas supera los mil euros mensuales “lo que le sitúa en una situación efectiva muy cercana a la exclusión residencial”.

Renta de las personas no emancipadas. El ingreso mensual neto en Euskadi es de 1.287,7 euros. En Álava es de 1.142,2 euros.

La cifra

17,2% de las solicitudes de alquiler protegido en Etxebide son de Álava.