Eginaren Eginez, la asociación de personas con discapacidad física de Álava, solicita al Ayuntamiento de Vitoria que, además de exponer la propuesta de instalación de expositores en la vía pública en la Mesa de Comercio, debe compartirla también con las agrupaciones de personas con discapacidad y de esta manera recibir las consideraciones y aportaciones del colectivo, impulsando la necesaria cogobernanza.
Lo hace, como dice, tras conocer que el Departamento de Movilidad y Espacio Público elaborará una propuesta técnica teniendo en cuenta las aportaciones del sector del comercio, y la “perpejlidad” que les ha causado que “este Departamento, siendo responsable de las condiciones de los itinerarios peatonales, no se haya puesto en contacto con las entidades del ámbito de la discapacidad y la movilidad reducida, siendo como somos directamente afectadas por la modificación de las condiciones de uso y ocupación del espacio público”.
Eginaren Eginez afirma que se enteró “por medio de la prensa” de la firma de un decreto de Alcaldía con el que el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz dbaa inicio a los trámites para la elaboración de una ordenanza para regular la instalación de expositores de productos de establecimientos comerciales en la vía pública de la ciudad.
Inquietud
“Como entidad que representa a la población con discapacidad física y movilidad reducida, debemos poner de manifiesto nuestra inquietud al respecto de esta iniciativa del gobierno municipal”, declaran, puesto que “son de sobra conocidos los problemas de accesibilidad que supone la ocupación de la vía pública por cualquier tipo de elemento que se ubique en los itinerarios peatonales”.
Unos obstáculos que “no solo afectan a la población que representamos, si no que generan dificultades al conjunto de la ciudadanía: a las personas de mayor edad, a las mujeres en avanzado estado de gestación, a quienes desplazan a menores en carros y sillas infantiles, a quien tiene afectada su movilidad de forma temporal por dificultades de salud, etc, tal y como se recoge en el Preámbulo de la Ley 20/97 para la Promoción de la Accesibilidad”.
Pero para Eginaren Eginez “es evidente que el mayor perjuicio” es para las personas con movilidad reducida permanente. “Estas somos las personas del colectivo, muchas utilizamos bastones, muletas, sillas de ruedas u otros elementos de apoyo y garantía de la movilidad, que, para poder transitar la vía pública de forma segura y autónoma -y sin tener que realizar esfuerzos ni exponerse a riesgos adicionales-, necesitamos espacios e itinerarios accesibles, es decir libres de cualquier obstáculo que comprometa los desplazamientos”.
Además, recuerdan que algunos de los elementos que más interfieren en la accesibilidad son los objetos móviles sin una ubicación permanente,” ya que además de obstaculizar de forma física, dificultan el reconocimiento de los itinerarios, la orientación espacial y la movilidad segura de las personas con afectaciones sensoriales y cognitivas”.
Evitar molestias
En las declaraciones expuestas en los medios el alcalde hace referencia al cumplimiento de criterios por parte de los establecimientos “para evitar molestias “. Eginaren Eginez se ve en la obligación de recordar al alcalde y a su gobierno municipal, la existencia de normas legales de obligado cumplimiento en materia de accesibilidad en las vías públicas, y de ubicación de elementos móviles en los itinerarios peatonales. “Normas que no pueden ser contradichas o ignoradas, ni por particulares, ni mucho menos por las administraciones públicas”, subraya.
La "relajación" en el cumplimiento y en el control de las normativas que regulan la accesibilidad y la seguridad de los itinerarios peatonales es precisamente lo que Eginaren eginez teme que suceda con la iniciativa del gobierno municipal de modificar las condiciones de ocupación de la vía publica para permitir la ubicación de expositores comerciales.
Precisamente, asegura que han sido “numerosas” las ocasiones en las que se ha denegado la ocupación de la vía publica para la instalación de elementos de accesibilidad para viviendas o para los propios locales comerciales, por lo que nos resultaría incomprensible el cambio de criterio, “y que lo que antes era inadmisible para facilitar el ejercicio de los derechos de la ciudadanía con movilidad reducida de Vitoria-Gasteiz, ahora sea promovido por el Ayuntamiento obstaculizándolos”.
Además, Eginaren Eginez teme que como el Ayuntamiento ha anunciado el plazo de 15 días para la presentación de aportaciones a esta nueva ordenanza, “de la que no se cuenta ni con un borrador inicial, resulta más que complicado que las personas y organizaciones afectadas o interesadas en ella podamos aportar nada”.