La bola del Deportivo Alavés estará en el sorteo de los octavos de final de la Copa del Rey, que se celebrará el próximo 7 de enero. Gracias a un gol de Carlos Vicente de penalti, los babazorros superaron al Sevilla en un partido donde reinó la igualdad, pero en el que hicieron más méritos que su rival (1-0). La nota negativa de la velada la pusieron Jonny y Lucas Boyé, ambos sustituidos por molestias.
Sorprendió Eduardo Coudet con sus once titulares elegidos para la cita ante los hispalenses. A diferencia de las eliminatorias previas, el argentino optó por salir de inicio con titulares como Jonny, Tenaglia, Pacheco, Blanco e Ibáñez, consecuencia en parte de las ausencias de Diarra y Mariano por decisión técnica. Raúl, Yusi, Carlos Vicente, Aleñá, Toni Martínez y el canterano Aitor Mañas completaron el equipo.
Los primeros compases fueron del Alavés. Los albiazules saltaron mandones al césped y su mera actitud, junto a la poca precisión del Sevilla con el balón, bastó para tomar la batuta de la contienda. Lo que sí costó más fue generar ocasiones de peligro, pues la línea de cinco que plantó Matías Almeyda en su zaga, bien ordenada, apenas dejó huecos a los atacantes locales. Dominio estéril durante el arranque.
Las malas noticias para la escuadra gasteiztarra llegaron superados los 20 minutos, cuando Jonny tuvo que retirarse por molestias, entrando Protesoni en su lugar. El uruguayo ocupó el puesto de central y Tenaglia se movió al lateral derecho. Ese contratiempo coincidió con el despertar de los visitantes, exigiendo al Glorioso con sus rápidas salidas al contragolpe tras recuperar en el centro del campo.
Aunque esto último, en realidad, no fue para tanto. El Alavés no sufrió en exceso hasta marcharse a los vestuarios, salvo en un disparo de Sow que tuvo que despejar Raúl. Por lo demás, la gran preocupación para el Chacho de cara al segundo tiempo era qué hacer para llegar a la portería de Odisseas. Carlos Vicente se marchó de su par y colgó alguna que otra pelota al área, pero ninguna fue rematada.
La nota positiva del primer tiempo fue la actuación del joven Mañas. Su falta de experiencia ante rivales de élite no le impidió combinar con acierto en distintas jugadas y, sobre todo, pelear cada balón dividido. No fueron pocos los duelos que ganó el delantero madrileño, quien también se dejó caer a la banda derecha unas cuantas veces. Solo le faltó mayor presencia en el área rival, pero ni Toni la tuvo.
AVISO Y PREMIO
De vuelta al césped, el Alavés tuvo en las botas de Protesoni la mejor ocasión del partido hasta ese momento. Llegó en un córner, tras casi 15 minutos en los que se jugó más bien poco, pero el remate del uruguayo dentro del área lo sacó Odisseas. Poco después intervino el Chacho, dando entrada a Guevara (Ibáñez) y Lucas Boyé (Mañas). Hombre por hombre, mantuvo el sistema el entrenador argentino.
Y el recién incorporado Boyé pudo romper la igualdad al poco de saltar al campo: Vicente rompió por su banda, exigió la parada de Odisseas y, con todo a favor en el punto de penalti, el de San Gregorio no pudo aprovechar el rechace. Su disparo lo desvió un defensor. Afortunadamente, el 1-0 no se hizo mucho más de rogar, y tuvo a los mismos protagonistas. El 15 provocó el penalti y el maño no perdonó.
Ya por delante gracias al acierto de Vicente desde los once metros, el Alavés se vio obligado a cerrar filas para aguantar el paso adelante del Sevilla. A ello trató de ayudar el Chacho, agotando sus cambios con Parada y Guridi en lugar de Yusi y Boyé. El delantero argentino, como Jonny en la primera mitad, se retiró lesionado. Al menos, como consuelo por los contratiempos, el resultado final fue favorable (1-0).
Ahora, el Glorioso deberá esperar varias semanas para conocer a su rival en los octavos de final. El sorteo de Copa está programado para el próximo 7 de enero, en el que a los gasteiztarras le podrán tocar rivales de su categoría o de Segunda División. Si sobrevive alguno de Primera RFEF, será para alguno de los equipos de la Supercopa.