laguardia - La organización interprofesional del vino de España (OIVE) ha pretendido parar la protesta de las pequeñas y medianas bodegas integradas en la asociación de bodegas de Rioja Alavesa (Abra), bodegas familiares de Rioja y la agrupación de bodegas centenarias y tradicionales de Rioja, que esta misma semana han mostrado su protesta por tener que aceptar los criterio de esa entidad nacional, cuando en la denominación Rioja ya hay una interprofesional, referidos tanto al pago de cuotas obligatorias como por tener que asumir los criterios de márketing establecidos.

En un comunicado, la OIVE explica que la decisión de recuperar el consumo del vino es uno de los principales retos. De ahí su campaña de promoción. La estrategia trazada no se ha centrado en ningún tipo de vino, estilo o zona de producción, sino que es una campaña emocional, que tiene por objetivo sentar las bases de recuperación del consumo de vino. Esta Interprofesional estatal reconoce la coexistencia con otras interprofesionales agroalimentarias del mismo producto y niega que exista, por tanto, un pago doble de cuotas.

La normativa entrará en vigor el 1 de agosto de 2019 y contará con dos principales novedades: la ampliación del periodo de vigencia, que pasará de tres a cinco años y la bajada de un 20% de las cuotas. Las cuotas pasarán de 0,065 euros/hl a 0,052 euros/hl para la comercialización de vino a granel y de 0,23 euros/hl a 0,18 euros/hl para la comercialización de vinos envasados. En definitiva, esta nueva tasa supondrá 1,35 euros por cada mil botellas de vino. - P.J.P.