París- En el noveno sábado consecutivo de protestas sociales se volvieron a producir enfrentamientos entre la policía antidisturbios y los chalecos amarillos con el lanzamiento de piedras y de gases lacrimógenos en torno al Arco del Triunfo, tanto en París como en la ciudad de Bourges (centro del país).
Los choques, que no fueron de tanta intensidad como en anteriotres ocasiones, estallaron en París poco después de las 14.30 hora local, cuando algunos encapuchados comenzaron a arrojar objetos a los antidisturbios, que respondieron con cargas y gases lacrimógenos. Al menos 53 personas habían sido detenidas a media tarde, en su mayoría por portar armas blancas.
A la misma hora, manifestantes congregados en Bourges, comenzaron a quemar parte del mobiliario urbano y a enfrentarse con la policía. Según la prefectura (delegación del Gobierno), más de 5.000 personas participaron ayer en la protesta en esa pequeña localidad de menos de 70.000 habitantes.
El primer ministro francés, Édouard Philippe, anunció el lunes que el Gobierno legislará para sancionar a los participantes en manifestaciones no declaradas y para crear un registro de agitadores, para que se les pueda impedir su presencia en las protestas. - Efe