La Asociación de Personas Consumidoras y Usuarias Vasca, EKA/ACUV, ha advertido de los fraudes telefónicos conocidos como 'Vishing', para el robo de datos bancarios, un método que no es "novedoso" pero en el que "últimamente han vuelto a ser muchas las personas afectadas". Por ello, ha animado a los ciudadanos a "no caer en la trampa".

'Vishing'

Según ha explicado, a través del 'vishing', un término que proviene del inglés 'voice and phishing', "las víctimas reciben una llamada de entidades conocidas -suplantan sus números de teléfono-, con la advertencia de que su ordenador o cualquier otro dispositivo sufre alguna incidencia". Después, han explicado, les convencen "en dar con la solución y especificando que deben descargarse un programa de control remoto".

"Y es en ese punto donde pervive el problema; puesto que una vez instalado el programa, el ciberdelincuente ya tiene acceso a todo tipo de archivos suplantando su identidad", ha advertido.

Desconfiar de cualquioer llamada sospechosa

Desde la asociación han señalado que, "tratándose de llamadas en las que se solicita la instalación de un virus o malware, cabe decir que detectar este ataque es bastante sencillo". No obstante, han insistido en la importancia de "algo tan básico y fundamental como es el desconfiar de primeras de cualquier llamada sospechosa por mucho que nos hagan una oferta golosa".

Además, nunca se debe facilitar ningún dato personal o bancario, ni ceder el control de los dispositivo. Si ya han accedido a él, la recomendación es desinstalar esas herramientas, desconectarlo de la red y hacer una revisión antivirus "por si se han descargado otros ficheros que pudieran seguir enviando información".

Ante cualquier movimiento "extraño" en el banco, se debe contactar con la oficina habitual para solicitar ayuda para solucionar el problema. Si se constata que se ha sido víctima de una estafa, lo recomendables es interponer "cuanto antes" una denuncia policial.

En este sentido, EKA/ACUV ha explicado que "es habitual que los maleantes soliciten pequeñas cantidades de dinero para no levantar suspicacias y sea más difícil que prosperen las denuncias".

Según ha indicado, se trata de "campañas activas que presentan picos temporales" y la mayoría suplantan la identidad de los servicios de atención al cliente de los principales proveedores de gas y electricidad, empresas tecnológicas como Microsoft, entidades bancarias u organismos públicos como el SEPE.