El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus ha asegurado que la pandemia de COVID-19, que se acerca a los 125.000 casos, es todavía "controlable", pero puede volverse un problema mucho más grave que el actual si los gobiernos no toman en serio su amenaza.
El médico etíope subrayó que la decisión de considerar el coronavirus una pandemia "no se tomó a la ligera" y respondió no sólo a la rápida expansión de la enfermedad, sino que también busca aumentar el nivel de alerta global y forzar a que los países tomen medidas más drásticas de contención.
Además la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha asegurado que "no hay pruebas" de que los animales de compañía como perros o gatos puedan estar infectados con el coronavirus Covid-19, por lo que no pueden propagarlo.
Sin embargo, explican en su página web que "siempre es una buena idea lavarse las manos con agua y jabón después del contacto con las mascotas". "Esto protege contra bacterias comunes como la 'E.coli y la 'Salmonella', que pueden pasar entre mascotas y humanos", resaltan,.
De la misma manera, informan de que "hasta la fecha no hay información ni evidencia que sugiera que el coronavirus pueda ser transmitido por mosquitos". "Es un virus respiratorio que se propaga principalmente a través de gotitas generadas cuando una persona infectada tose o estornuda, o a través de gotitas de saliva o secreciones de la nariz", recuerdan.
Acerca de los detectores de temperatura, argumentan que son eficaces para detectar aquellos positivos que tengan fiebre debido a la infección, pero puntualizan que "no pueden detectar a las personas que están infectadas pero que aún no están enfermas de fiebre". "Esto se debe a que las personas infectadas tardan entre 2 y 10 días en enfermarse y desarrollar fiebre", exponen.
En esta sección de 'desmitificación' de bulos, la OMS niega que el clima frío puede matar el virus, que tomar un baño caliente o comer ajo puede prevenir la infección, o que los mosquitos pueden propagar el virus. "No hay pruebas de ninguna de estas afirmaciones", afirman con rotunidad.
"No hay razón para creer que el clima frío pueda matar el nuevo coronavirus u otras enfermedades. La temperatura normal del cuerpo humano se mantiene alrededor de 36,5C a 37C, sin importar la temperatura externa o el clima. La forma más efectiva de protegerse contra el nuevo coronavirus es limpiarse frecuentemente las manos con un desinfectante para manos a base de alcohol o lavarlas con agua y jabón", sostiene el organismo internacional.
De la misma forma, rechazan que un baño caliente evite los contagios. Aquí, recuerdan que la temperatura corporal se mantiene siempre en los mismos niveles, independientemente del calor que desprenda la ducha. "En realidad, darse un baño caliente con agua extremadamente caliente puede ser perjudicial, ya que puede quemarte", insisten.
Tampoco son útiles para matar al virus los secadores de manos, las lámparas de rayos ultravioleta o el rociado de alcohol o cloro por todo el cuerpo. "El rociar alcohol o cloro por todo el cuerpo no matará los virus que ya han entrado en el cuerpo. Rociar tales sustancias puede ser dañino para la ropa o las membranas mucosas (es decir, los ojos, la boca). Tenga en cuenta que tanto el alcohol como el cloro pueden ser útiles para desinfectar superficies, pero deben ser utilizados bajo las recomendaciones adecuadas", apostillan.
En este mismo sentido, refutan que el enjuague nasal regular con solución salina ayude a prevenir la infeccion: "Existen algunas pruebas limitadas de que enjuagar regularmente la nariz con solución salina puede ayudar a las personas a recuperarse más rápidamente del resfriado común. Sin embargo, no se ha demostrado que enjuagar regularmente la nariz prevenga las infecciones respiratorias". Por último, tampoco es útil el ajo: "No hay evidencia del brote actual de que comer ajo haya protegido a las personas del nuevo coronavirus".