La gerente de Fomento de I+D+i de Faes Farma, quien ha participado en el I Foro de Sanidad organizado por Grupo Noticias el pasado lunes, explica las principales líneas que marcan el rumbo de la compañía farmacéutica: la investigación, la innovación, el desarrollo del talento y la internacionalización, pero siempre con la mirada puesta en Euskadi.

Hablar de Faes Farma es hablar de investigación pura y dura…

Exactamente. Faes Farma es la primera empresa farmacéutica en Euskadi y se ha mantenido durante todos estos años en primera línea. Ya llevamos 89 años y siempre a la vanguardia de la investigación y la innovación, apostando por el talento y las infraestructuras… Y todo ello, para generar I+D, aquí, en Euskadi. Para nosotros es muy importante el talento, que es el motor de la I+D+i. Al final puedes tener grandes infraestructuras o mucha inversión pero si no tenemos ese soporte de los investigadores, es decir, las cabezas y las manos, no se llega. Por eso, hacemos un esfuerzo particular por fomentar el talento, por formar la gente de aquí, por traer gente formada también y por hacer todo para que puedan seguir una formación continuada y por supuesto se queden aquí en Euskadi.

Faes Farma ha crecido muchísimo, está presente en numerosos países, pero su sede está aquí en Bizkaia.

Faes Farma ha estado en Lamiako y desde ahí ha ido creciendo y expandiéndose a nivel nacional e internacional. No obstante, su I+D+i sigue estando ahí y seguimos creciendo y seguimos apostando por crear conocimiento y crear nuevos productos farmacéuticos dirigidos al paciente y a la necesidad que tiene. Con una I+D+i realizada aquí, con investigadores potentes y apostando siempre por el crecimiento en el País Vasco.

¿Es la I+D+i uno de los pilares más importantes para la compañía?

La investigación y la innovación es la que nos va a permitir desarrollar nuevos productos, nuevos desarrollos y responder esas necesidades de los pacientes que siempre vamos identificando. Por tanto, se ha invertido muchísimo en ese ámbito, sobre todo en los últimos años. El año pasado tuvimos un gasto en I+D+i de más de 15 millones de euros y unas inversiones de los equipamientos en torno a los 2,5 millones de euros. Faes Farma invierte mucho en I+D+i de lo que son sus ventas anuales. También ha crecido muchísimo en personal; ahora estamos en el departamento de investigación en torno a 90 personas de una plantilla total de 1.673 personas.

Faes pone principalmente el foco en los nuevos productos farmacéuticos, ¿verdad?

La inversión en I+D+i tiene como objetivo desarrollar nuevos productos farmacéuticos. Siempre estamos buscando dentro de nuestras áreas de interés terapéuticas; por un lado, el sistema digestivo; por otro lado, la alergia donde tenemos una molécula muy potente, la bilastina, que ha sido producto de la investigación de Faes Farma y es número uno en ventas a nivel nacional y está presente en más de 130 países. Y la última área, que es la de inmunomodulación.

Los productos de Faes se internacionalizan, estáis en el mercado global.

Tenemos presencia en 130 países bien sea por filiales, por acuerdos o por implantación directa y el objetivo es que todo el conocimiento y todos los productos que se desarrollan aquí en Euskadi se lleven internacionalmente. Se hace un esfuerzo muy potente desde nuestras redes de venta que, por supuesto, llegan al médico, al paciente y nos permiten ir creciendo.

Y para ello, ¿estáis ampliando personal e instalaciones?

Desde Faes Farma tenemos que dar una respuesta a esta internacionalización y a la necesidad de venta, por lo cual a día de hoy se está construyendo una planta industrial en Derio dónde podremos triplicar nuestra actual capacidad de producción. Tendrá en torno a unos 60.000 metros cuadrados, una planta industrial con los equipamientos más modernos para aumentar la producción a la vez que protegemos el medioambiente y reducimos el uso de recursos energéticos.

Es evidente que fomentáis el ecosistema vasco; ¿colaboráis también con otros centros de investigación?  

Efectivamente, es un esfuerzo al que nosotros le ponemos mucho foco e interés porque somos una empresa grande si nos comparamos con empresas pequeñas, pero somos pequeños cuando nos comparamos con otras empresas farmacéuticas multinacionales. Por lo cual somos conscientes que cuesta mucho, y más si vas solo. En Euskadi tenemos centros de investigación muy potentes, muy buenos, de muy alto nivel en el ámbito de la investigación, incluyendo las universidades, centros de investigación o centros tecnológicos y, por tanto, nosotros colaboramos con ellos. Hemos creado un ecosistema de investigación y de innovación muy potente que nos permite colaborar con cada uno de estos centros en las diferentes áreas de interés para nosotros. Somos muy activos como empresa tractora que somos y que debemos ser, porque al fin y al cabo no sólo colaboramos con los centros de investigación sino también con aquellas empresas pequeñas que van creciendo como producto de alguna investigación. 

“En Euskadi tenemos centros de investigación muy potentes, muy buenos, de muy alto nivel”

¿La investigación farmacéutica se ha acentuado aún más a raíz de la pandemia que hemos vivido?

Que la investigación en salud es esencial, creo que ha sido una reflexión a nivel global después de la pandemia, tanto para el ciudadano de a pie como para las instituciones. Ha sido evidente que la investigación es lo que nos puede sacar de situaciones tan duras como la que tuvimos en un tiempo relativamente corto. Desde la Comisión Europea, por ejemplo, están dirigiendo ahora a todos los países en Europa hacia una apuesta a la I+D+i importante. Por lo tanto, hemos visto que desde las instituciones se ha dado apoyo, como ocurre con los Fondos Next Generation y otros fondos que permiten tener esa recuperación en diferentes áreas, y una de ellas es la investigación.

Nosotros tuvimos un impacto muy directo con Calcifediol, que es una molécula que tenemos en Faes Farma, porque vimos que tenía un efecto positivo en la recuperación de pacientes con covid, de tal manera que se reducía el número de personas que iba a los cuidados intensivos, de tal manera que administrada junto con la terapia estándar, reducía el número de pacientes que iban a cuidados intensivos y la mortalidad. Entonces ahí tuvimos un impacto directo, y eso aunque ya teníamos nuestro plan estratégico de investigación 20-25, nos ha motivado aún más a mantener ese compromiso que ya tenemos con la I+D+i.