El lehendakari Iñigo Urkullu ha reafirmado su “compromiso social y político” con el desarrollo del autogobierno, un paso necesario porque mientras la acción legislativa del Gobierno vasco sigue adelante, la defensa de las competencias ya transferidas y la reivindicación de las que aún no se han derivado a Euskadi siguen requiriendo de toda la atención y esfuerzo del Ejecutivo que lidera.
En el marco del Encuentro DEIA ‘Euskadi 2023, retos y prioridades’, ha culminado su discurso denunciando la “erosión silenciosa derivada de la constante pulsión recentralizadora de la Administración española”, lo que obliga a la “defensa permanente” de las competencias propias. Una “progresiva intromisión y, en ocasiones, laminación del autogobierno”, ha denunciado, que ya fue objeto de un informe de 700 páginas remitido al Parlamento en 2021.
La mayor piedra en el camino para que Euskadi pueda ejercer plenamente sus capacidades está en las competencias que siguen “pendientes de transferir”, pese a que existe un “compromiso” del Ejecutivo de Pedro Sánchez para ello, “públicamente y por escrito”, que data de 2020. La aritmética es tozuda y, de las 31 competencias comprometidas, “se han materializado tan solo cinco”, ha señalado en el Palacio Euskalduna ante un auditorio abarrotado con una nutrida presencia de consejeros del Gobierno vasco, además del alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, el diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria y la presidenta de las Juntas del territorio, Ana Otadui.
Se trata, según el lehendakari, de “un escasísimo bagaje para el compromiso que el propio Pedro Sánchez adquirió con la sociedad vasca”, ha censurado. Por este motivo, “vamos a mantener el objetivo de actualizar nuestro autogobierno”, ha reafirmado.
Falta de respuesta
En el tramo final de su intervención, Iñigo Urkullu ha lamentado la ausencia de respuesta a la propuesta que trasladó al presidente español el pasado 22 de septiembre, que incluía culminar la transferencia en materia ferroviaria; abrir grupos de trabajo bilaterales para negociar otras cinco competencias ya remitidas por Lakua y convocar una Comisión Permanente entre los dos ejecutivos para cumplir el calendario aprobado. Por ello, y ante la “falta de avances”, ha realizado una nueva propuesta a Sánchez: convocar la Comisión Bilateral de Cooperación Estado-CAV, que fue constituida el 29 de junio de 1987, ha recordado.
A ello se añade la propuesta para que Euskadi participe de forma “plena y efectiva” en los consejos y comités de la Comisión Europea vinculados directamente “con la especificidad de nuestro autogobierno”, con el fin de que “podamos defender los intereses de Euskadi” en ese contexto. Ha advertido además de la necesidad de adecuar el autogobierno a los cambios que se han producido en las circunstancias económicas y sociales, sobre todo por la guerra en Ucrania. “El nuevo marco europeo es clave en el proceso de actualización del autogobierno vasco”, ha sentenciado.
El lehendakari ha lamentado que, más de 40 años después de entrar en vigor, “la triste realidad es que el Estatuto vasco, el primero en aprobarse en la etapa democrática, es el único que está sin cumplir y sin actualizar”. En lo que a la acción del Parlamento Vasco se refiere, con 23 nuevas leyes actualmente en fase de tramitación (cerca de un 74% de las que se han remitido en la presente legislatura), ha llamado a “culminar los trabajos desarrollados” en la cámara y a hacerlo además “con el mayor consenso posible” de los grupos de la oposición. Un “objetivo prioritario”, según él, pese al “escollo” que supone la coyuntura electoral, con su primera parada en las municipales y forales del 28 de mayo.