El dirigente del Partido Popular Alfonso Fernández Mañueco ha jurado su cargo este martes como presidente de la Junta de Castilla y León en la XI Legislatura con la voluntad de ser "el presidente de todos, sin distinción de opiniones o ideologías". El gran ausente del acto ha sido el nuevo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que ha justificado su no presencia por un encuentro en Madrid con los agentes sociales.

Pese a su ausencia, Mañueco ha expresado en su discurso su agradecimiento a Feijóo por su respaldo "siempre", tanto político como personal, que se ha acrecentado desde que el gallego asumió las riendas del PP este mismo mes.

"Ya le he trasladado al presidente Feijóo mi agradecimiento por su respaldo, que siempre he tenido, en lo político y en lo personal, desde hace muchos años pero especialmente desde que es presidente del partido", ha aseverado en concreto Fernández Mañueco en su discurso de toma de posesión ante 250 invitados.

Mañueco ha agradecido la presencia de la vicepresidenta segunda del Congreso, Ana Pastor, y de la portavoz del PP en el Congreso y secretaria general del Partido Popular, Cuca Gamarra. "Gracias por estar aquí, representando el apoyo de la Dirección Nacional del Partido Popular, acompañada de otros cargos del partido, como el portavoz del Senado, Javier Maroto, y distintos presidentes autonómicos del partido", ha expresado en concreto.

El nuevo presidente de la Junta de Castilla y León se ha dirigido expresamente al partido con el que compartirá responsabilidades de Gobierno durante los próximos cuatro años, Vox, con su presidente, Santiago Abascal, a la cabeza, con una mención a "Juan" --García-Gallardo--, desde mañana vicepresidente del Gobierno de coalición.

Y ha hecho extensivo sus agradecimientos a todos los que le han acompañado en este caso, como la ministra de Educación, Pilar Alegría, ante la que ha reafirmado que el de Castilla y León será "siempre" un gobierno leal con el de España en todo lo que beneficie a la nación y para garantizar su integridad, a la vez que exigente en la defensa de los intereses de la Comunidad Autónoma.

Entre los asistentes a la toma de posesión se encontraba también el anterior expresidente del Gobierno del PP, Mariano Rajoy, a quien ha agradecido su "confianza, consejos y ejemplo político y de gestión". "Me distingues con tu cariño", ha aseverado para dirigirse después a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, la única presidenta con gestión que ha acudido al acto de toma de posesión, a la que ha agradecido su apoyo.

"Nos unen afectos personales y objetivos políticos y sé que cuento contigo en esta nueva andadura. Vamos a estrechar lazos y colaborar en objetivos comunes con la mayor intensidad posible", ha aseverado ante la presidenta madrileña.

En clave personal, ha tenido palabras de agradecimiento emocionado a su mujer y a sus dos hijas, presentes en el hemiciclo, por su "constante apoyo" y a las que ha pedido "una vez más, que renueven su paciencia y su comprensión", y se ha dirigido también a sus padres y familia por haberle hecho crecer "en un ambiente de valores" que le han definido como persona y le han guiado a lo largo de toda su vida.

"A todos los amigos que me han ayudado y me han ofrecido generosidad, comprensión, palabras de aliento y mano tendida en los momentos difíciles. Gracias por haber estado siempre ahí. A mis compañeros de partido, que siempre han confiado en mí", ha concluido.

El principal mensaje que ha trasladado Fernández Mañueco en su intervención ha sido la petición de "colaboración de todos", en referencia expresa al Gobierno, a los grupos políticos y a los agentes económicos y sociales.

"Insisto, de todos", ha reiterado Fernández Mañueco que ha recordado que Castilla y León "no es ni puede ser nunca" el proyecto de un sólo partido o de un sólo gobierno. "Debe serlo de toda la sociedad. Y, por ello, toda nuestra sociedad debe implicarse", ha pedido el presidente de la Junta que ha ofrecido "moderación, diálogo, tolerancia, integración y un espíritu abierto y constructivo" para poder "crecer con la diversidad de opiniones y el debate público".

Alfonso Fernández Mañueco ha reivindicado además "la política de gestión frente a la política de gestos" y ha aseverado que en un momento en el que "toda España observa a Castilla y León" se va "a poner de moda".

"Estoy convencido de que, con el trabajo y la colaboración de todos, podemos conseguirlo. Podemos hacer más grande a Castilla y León. Con esperanza e ilusión", ha concluido el presidente que ha asumido un futuro de Castilla y León "con dificultades y retos" pero que será "brillante" gracias a "la innovación, la solidaridad, la gestión, y con el trabajo y el esfuerzo de todos".

El presidente de la Junta, que ya asumió este cargo en julio de 2019, ha recordado en su discurso de toma de posesión que gobernar no es sólo distribuir recursos públicos o aplicar mecánicamente leyes, baremos o reglamentos y ha explicado que, al contrario, obliga a los responsables a estar muy cerca de las personas, de sus inquietudes y preocupaciones y "sin cámaras, fastos y oropeles".

RECOMIENDA RACIONALIDAD, REALISMO, MESURA Y PRUDENCIA

"En suma, gobernar es utilizar la política como palanca del cambio social. Para abrir caminos, señalar objetivos y mover voluntades. La política debe ser el arte de mantener activa nuestra vida en sociedad e impulsar todo lo necesario para no detener su progreso. Debe ser el motor para mover a los pueblos y animar ilusiones. Pero siempre con racionalidad, realismo, mesura y prudencia", ha pedido en su discurso ante sus nuevos socios de gobierno.

Fernández Mañueco ha explicado al respecto que en política "no hay redentores ni soluciones milagrosas" y ha aseverado que, "como en casi todo", el éxito sólo se consigue "con trabajo diario, dedicación constante y resistencia ante las dificultades", unos principios que se ha comprometido a aplicar "en la apasionante tarea de gobernar" Castilla y León, a la que se ha referido como su "principal obsesión" y en la que se ha mostrado plenamente confiado porque es "una tierra de oportunidades".

"Frente a los que opinan lo contrario, les quiero decir que Castilla y León demuestra, una y otra vez, su voluntad de futuro y su capacidad para innovar y avanzar, con ideas y con iniciativas", ha reivindicado Fernández Mañueco, que se ha referido a Castilla y León como "una tierra fuerte, ilusionada, competitiva, abierta y próspera" con la "ambición" de que sea una Castilla y León activa, alejada de "tópicos de pasividad o conservadurismo que injustamente nos atribuyen", ha lamentado.

El presidente de la Junta ha abogado por construir una Castilla y León "en continuo progreso, con oportunidades y capaz de ofrecer iniciativas, innovación, audacia, inteligencia, talento, originalidad, solidaridad y dinamismo" en la que el espíritu de superación oriente e impulse todos los actos "con un constante empeño por mejorar".

"También quiero una Castilla y León firme, que confíe plenamente en nuestras posibilidades como Comunidad. Sólo los pueblos seguros de sí mismos son capaces de ganar su futuro", ha añadido el presidente en su alocución en el que ha pedido una "Castilla y León orgullosa" de su "impresionante historia", de su "brillante presente" y del "ilusionante futuro" que puede conseguir.

A esto ha añadido la necesidad de construir "una Castilla y León con humildad" pero también "sin complejo alguno" por el "prestigio" de su identidad y su protagonismo en la España Autonómica.

"Quiero una Castilla y León responsable, consciente de que los derechos sociales conseguidos con tanto esfuerzo se tienen que defender cada día. Que no cabe indolencia o despreocupación alguna para conservarlos y mejorarlos, reforzando la solidaridad hacia los más desfavorecidos", ha pedido el presidente de la Junta que ha ambicionado también una comunidad con valores y en la que la igualdad de oportunidades "no se entienda como una continua equiparación a la baja, sino como la posibilidad de que cada uno labre su destino con su propio esfuerzo, y así se le reconozca sin complejos".

"Y, sobre todo, quiero una Castilla y León orientada a las personas, que son y siempre serán mi objetivo y mi referente esencial. Porque creo profundamente en cada una de las personas que conforman nuestra sociedad. En nuestras mujeres, que avanzan decididas a ocupar el protagonismo que merecen. En nuestros jóvenes, que trabajan duro para abrirse camino en un entorno cada vez más exigente. En nuestros mayores, que nos dotan de una impagable experiencia", ha concluido.

Finalmente, ha hecho una referencia expresa a los emprendedores, a los agricultores y ganaderos, a los autónomos, a los trabajadores y a los servidores públicos.