- La vicepresidenta de la Fundación Fernando Buesa, Sara Buesa, pidió ayer “no dejar atrás la memoria” y construir un futuro en el que ningún proyecto político excluyente tenga cabida”. Además, añadió que la empatía con las víctimas “no es compatible con el apoyo a las acciones violentas de los victimarios”. Buesa realizó estas manifestaciones en el acto desarrollado con motivo del XXII aniversario In Memorian por Fernando Buesa y Jorge Díez, asesinados por ETA en el año 2000.
Sara Buesa, hija del dirigente socialista asesinado por ETA junto a su escolta Jorge Díez, mantuvo una charla con el exdirigente socialista Eduardo Madina. El exdiputado del PSOE y ex secretario general de las Juventudes Socialistas de Euskadi lamentó que, en la lucha contra ETA, una mayoría de la sociedad vasca optó “por la indiferencia” y le costó “darse cuenta de que había que plantar cara al monstruo”.
Buesa señaló que el pasado “tan doloroso” que se arrastra pesa “como una mochila llena de piedras” y se trata de avanzar hacia un nuevo futuro, y en ocasiones parece que se vislumbra, que se consigue “abrir una ventana y entra un soplo de aire fresco y limpio”. Sin embargo, avisó de que luego “reaparecen los fantasmas”. Buesa criticó la “épica que continúa existiendo en torno al terrorismo de ETA” y añadió que la empatía con las víctimas “no es compatible con el apoyo a las acciones violentas de los victimarios”. “Y es doloroso para nosotros como víctimas, pero también daña mucho a la sociedad”, agregó. A su juicio, la verdadera defensa de los derechos humanos supone defender, de igual manera, “los derechos de todas las personas, de los que me gustan y de los que no me gustan”. “Queda mucho trecho para llegar”, dijo.