El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha asegurado este martes que ve "contradicciones" en el PSOE sobre la cuestión de las macrogranjas, recordando que apoyó una moratoria de Castilla-La Mancha en Cuenca contra estos proyectos, y ha señalado que no se siente desautorizado por las el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que lamentó la polémica por sus declaraciones.
En una entrevista en La Sexta, recogida por Europa Press, Garzón ha lamentado que el presidente castellano-manchego, Emiliano García-Page, le atacase con "ferocidad" y con formas en política que no comparte. Así, ha reiterado que no se siente desautorizado por Sánchez. "Creo que es la línea que tiene que seguir un gobierno progresista", ha dicho sobre el sector ganadero.