El Pleno del Congreso ha rechazado este martes reprobar al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y no ha apoyado sendas mociones de Vox y PP que pedían censurarle por la política penitenciaria que lleva a cabo el Gobierno de coalición de PSOE y Podemos.
No es la primera vez que los principales partidos de la oposición llevan a Pleno esa solicitud de reprobación, que en esta ocasión han justificado en el asesinato del niño de 9 años, Álex, en la localidad riojana de Lardero a manos de un preso condenado por agresión sexual y al que un juez le concedió la libertad condicional después de que Prisiones le otorgara el tercer grado.
PP y Vox han defendido estas mociones, consecuencia ambas de una interpelación al ministro por este asunto, horas después de que los presos de ETA anunciaran el fin de los homenajes a los etarras excarcelados, los llamados ongi etorri, lo que también ha estado presente en el debate.
Los proponentes de ambas iniciativas han aprovechado para incluir en el texto de las mociones la petición de ampliar los supuestos de aplicación de la prisión permanente revisable para otros crímenes abyectos.
Vox ha ido mas lejos. Así, su diputada Macarena Olona ha reivindicado cadena perpetua para los crímenes "más execrables, para esos monstruos que nunca se van a reinsertar", como el asesino de Álex, ha indicado.
Pero su propuesta no ha encontrado seguidores más allá de los diputados de su grupo. Es más, la mayoría de los portavoces le han recriminado que lo presentara y más a través de una moción.
Como ya hiciera en la interpelación el pasado 10 de noviembre, Olona ha responsabilizado al ministro Marlaska de la muerte de Álex y le ha acusado de haber dejado al asesino en la calle y de decidirlo con "alevosía y premeditación".
"Se podía haber evitado. Alguien tiene que responder ante sus padres y ante la sociedad", ha recalcado.
Miguel Gutiérrez, de Ciudadanos, ha considerado que la reprobación a Marlaska sería una "reprobación vicaria porque a quien hay que reprobar es a Pedro Sánchez, que es quien permite la ministro del Interior hacer estas cosas".
Desde Unidas Podemos, Juan Antonio Delgado ha acusado a Vox de llevar a la cámara un "sainete aliñado con verborrea barroca" y disfrazado de una "supuesta preocupación por la seguridad de la gente".
Por el PP, Beatriz Álvarez y Luis Santamaría también han defendido la reprobación y han aludido a lo que hay detrás de la política penitenciaria del Gobierno: "blanquear a Bildu".
Santamaría ha insistido en que el caso del pequeño Álex es "el más triste exponente del fracaso" de esa política.
Manuel Arribas, del PSOE, ha calificado la moción de Vox de "falaz" y "poco reflexiva" y ha tildado como acto de "mala fe" atribuir al ministro la responsabilidad de la muerte de un menor. "Es falso y legalmente, una calumnia".