Valencia - Cada día que pasa el cerco judicial se estrecha sobre Rita Barberá y se ve más cercana su implicación en el caso Imelsa que se ha llevado por delante, y a comisaría, a toda la dirección local del PP en Valencia. Ante una posible caída de la exalcaldesa el Partido Popular ha decidido poner tierra de por medio y dejarla políticamente a su suerte para que no termine contaminando al partido más de lo que ya lo está. En consecuencia, tal y como aseguró ayer la secretaría general del partido, María Dolores de Cospedal, los populares no tienen intención de dar un trato especial a Barberá y actuará con ella como con cualquier otro militante. De Cospedal aseguró que el partido a nivel nacional y regional actuará con la exalcaldesa “en consecuencia” y tomará las mismas medidas que tome “con otros militantes que se encuentren en una situación semejante”. Recordó que Barberá dio el martes explicaciones en un comunicado y “a partir de ahí” el partido, “a nivel nacional y de Valencia”, han dicho “claramente” que tomarán “todas las medidas con Rita Barberá que se tomen con otros militantes del partido que se encuentren en una situación semejante”. Así pues, ha perdido la protección de la cúpula del partido que la ha puesto bajo sospecha. La dirección regional del PP no quiso pronunciarse ayer sobre el comunicado de Barberá hecho público la víspera, en el que afirmaba que en “ningún contrato del Ayuntamiento de Valencia se ha amañado, ni ha habido ninguna mordida, ni desvío a financiación ilegal”. No obstante, fuentes del PP sí se refirieron a la situación de sus concejales en el Ayuntamiento de Valencia que mantienen su condición de investigados tras prestar declaración ante el juez que investiga el supuesto cobro de comisiones ilegales en Imelsa, dependiente de la Diputación de Valencia, y el posible blanqueo de capitales en el grupo municipal.

Durante la jornada de ayer prestó declaración ante el juez el hasta ahora portavoz municipal del PP Alfonso Novo, que mantiene su condición de investigado a su salida del juzgado y que aseguró que no dejará su acta de concejal hasta que “se levante el secreto del sumario y declare todo el mundo”. Admitió que conocía las donaciones de mil euros que se efectuaron al partido durante la campaña electoral y que él participó “por transferencia bancaria”, pero negó que se le devolviese ninguna cantidad en efectivo: “No me devolvieron nada; no sé a otros; que yo sepa, no”.

También declaró el asesor del PP del Ayuntamiento y encargado de las redes sociales Luis Salom, que se mantiene en calidad de investigado y que lamentó que la prensa esté dando “más veracidad a las palabras de unas personas que a las de otras” y advirtió de que, “a lo mejor, no es la verdad”. Tres de los cuatro testigos que declararon ayer en el juzgado por ese supuesto blanqueo confirmaron que se les propuso participar en una operación clara de blanqueo.

Mientras tanto, en lo político, la dirección regional del PPCV mantuvo una reunión con la cúpula estatal del partido para explicarle su propuesta de refundación, un encuentro en el que la propuesta fue recibida con “sensibilidad” y sin descartar ninguna posibilidad. - E.P.