El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, preguntó a su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, si podría "golpear" las ciudades rusas de Moscú o San Petesburgo, en una llamada telefónica que tuvo lugar el 4 de julio, según publicó este martes el diario británico Financial Times (FT).

De acuerdo a fuentes al tanto de lo discutido en la llamada, que se produjo un día después de la conversación entre Trump y el presidente ruso, Vladímir Putin, el mandatario estadounidense alentó a Zelenski a intensificar los ataques en el interior de Rusia, agrega el FT.

El presidente ucraniano, por su parte, respondió que podrían alcanzar Moscú o San Petesburgo si Estados Unidos les proporcionaba armas de largo alcance.

"Volodímir, ¿puedes atacar Moscú? ¿Puedes atacar San Petesburgo también?", relata el FT sobre las palabras de Trump, a lo que Zelenski respondió que "por supuesto" si les "dan las armas".

Esta estrategia de Trump, de acuerdo con lo publicado en el rotativo británico, pasa por "hacerles sentir el dolor (a los rusos)" y forzar que el Kremlin se siente a la mesa de negociaciones para alcanzar una solución al conflicto que estalló en febrero de 2022.

Este martes, el presidente estadounidense dijo en una entrevista a la BBC estar decepcionado con Putin pero recalcó que aún no ha "terminado" con él, al hablar acerca de los esfuerzos para alcanzar un acuerdo sobre Ucrania.

Amenazas con aranceles

El Kremlin, por otro lado, consideró "muy seria" el ultimátum de Trump de 50 días a Rusia para que logre un acuerdo con Ucrania, pero llamó a esperar la reacción del líder ruso, Vladímir Putin.

"La declaración del presidente de EE.UU. es muy seria. Parte de ella iba dirigida personalmente al presidente Putin. Sin lugar a dudas, necesitamos tiempo para el análisis de lo que se ha dicho en Washington", dijo Dmitri Peskov, portavoz presidencial, en su rueda de prensa telefónica diaria.

Añadió que si el jefe del Kremlin lo considera "necesario", hará una declaración al respecto. "No quiero precipitarme. Esperemos la decisión de Putin", señaló.

A su vez, Peskov aseguró en su comparecencia que las decisiones de Estados Unidos y la OTAN, en alusión al suministro de armamento estadounidense a sus aliados europeos con destino a Ucrania, animan a Kiev a seguir combatiendo.

"Parece que tales decisiones (...) la parte ucraniana se las toma no como una señal para la paz, sino como una señal para la continuación de la guerra", destacó.

Además, recordó que no acaba de llegar la propuesta de Kiev para celebrar en Estambul la tercera ronda de negociaciones directas y añadió que Moscú sigue dispuesto a participar en dichas negociaciones de arreglo, aunque, mientras, no está dispuesto a declarar un alto el fuego.

"Ese diálogo también lo quieren ver en Washington y presuntamente en Europa. Aunque, a juzgar por sus declaraciones, en Europa quieren ver más bien una escalada de las acciones militares que el paso a la paz. Pero Kiev mantiene silencio", recalcó.