ROMA. En un acto de su partido en la localidad de Vicenza (norte), Bossi, quien es ministro para las Reformas del Federalismo, rechazó la posibilidad de que la mayoría parlamentaria gobernante llegue a un pacto con la Unión de Democristianos de Centro (UDC) para garantizar la estabilidad hasta el final de la legislatura en 2013.

"Yo ya hace tres meses que digo que la única solución higiénica es ir al voto: hemos perdido tiempo dando tiempo a los demás para organizarse", comentó el líder de la federalista LN, en declaraciones que recogen los medios italianos.

El único gran aliado que le queda a Berlusconi tras la guerra declarada con su antiguo número dos, Gianfranco Fini, aseguró además que Italia está lista para unas elecciones anticipadas, pues el argumento de la crisis económica que la mayoría de partidos esgrimen para no ir a las urnas es, según él, sólo una "coartada".

Bossi se refirió además a lo que muchos analistas políticos ven como la opción deseable para que Berlusconi asegure la estabilidad de su Gobierno: un pacto de legislatura con la UDC de Pier Ferdinando Casini, quien, sin embargo, se alió con Fini para presentar la moción de censura contra el Gobierno del pasado martes.

"Yo, si fuera Berlusconi, estaría atento a no dejar entrar (en el Gobierno) a sus enemigos, a quienes lo quieren muerto, no daría un gran paso adelante, sino un paso atrás", afirmó Bossi, líder del partido que comparte el Gobierno en Italia junto al Pueblo de la Libertad (PDL) del primer ministro.

"El problema es que un Gobierno, si sigue en pie, lo hace para hacer cambios y leyes", agregó el líder de la Liga Norte, quien negó que su Ejecutivo se hubiera visto envuelto en compra de votos para conseguir que no prosperara la moción de censura de la oposición en la Cámara de los Diputados.

La votación del pasado martes en el Parlamento italiano permitió la permanencia de Berlusconi, pero dio una nueva muestra de la debilidad del Ejecutivo, que necesita otras alianzas parlamentarias para evitar que continúe la incertidumbre política que vive Italia desde este verano.