El francés Fabio Quartararo (Yamaha YZR M 1) parte como el rival a batir en el inicio del campeonato del mundo de MotoGP de 2022 por su condición de campeón de la pasada campaña, pero a tenor de lo visto durante los entrenamientos de pretemporada todo parece indicar que lo va a tener difícil para renovar el título, como también le sucedió al mallorquín Joan Mir (Suzuki GSX RR) en 2020, y la gran pregunta que flota en el ambiente no es otra que saber si ¿vuelve el mejor Marc Márquez?
El trabajo realizado por los ingenieros de Yamaha durante el invierno no parece estar al mismo nivel que el realizado por otras marcas, en particular Honda, Aprilia y Suzuki, pues la italiana Ducati siempre está ahí, entre las más poderosas y rápidas, aunque luego le falta "sentenciar" con sus pilotos.
Sólo Fabio Quartararo parece haber empleado sus "habilidades" de campeón para estar entre los más rápidos de la categoría pues al resto de pilotos Yamaha les ha costado "bastante" alcanzar un determinado nivel, algo que en el caso de los representantes de Repsol Honda, el equipo oficial de las motos del Ala Dorada japonesa, ha sido todo lo contrario pues en Qatar sorprendió Pol Espargaró, con un Marc Márquez recuperando el "tono" de la competición después de muchos meses de inactividad, y en Mandalika (Indonesia), todo cambio, a mejor, para ambos.
Pol Espargaró acabó como el más rápido a una vuelta y Marc Márquez no anduvo lejos pero en su caso se pudo comprobar claramente que su gran objetivo, más que buscar una vuelta rápida, era dar vueltas y más vueltas y buscar lo mejor de la puesta a punto de una "novísima" Repsol Honda RC 213 V para poder afrontar toda la temporada con las mayores garantías de éxito.
Y no mintió Marc Márquez cuando dijo que primero iba a recuperar las sensaciones con la moto, lo que hizo en Qatar, y que después buscaría ponerla a su gusto y especificaciones, lo que hizo en Mandalika. Al término de todo ello se pudo ver a un Marc Márquez muy tranquilo y con muchas ganas de "querer más", lo que podría ser toda una premonición de lo que está por venir con el ocho veces campeón del mundo.
Esas premisas, unidas a su rendimiento y el de su compañero de equipo Pol Espargaró, el más rápido en Mandalika, coloca a los pilotos de Repsol en una posición claramente favorable antes del inicio de la temporada, algo que no sucedía desde hace años, aunque luego se aplicasen "a fondo" para revertir la situación en pista.
Pero no se debe olvidar uno de los datos más relevantes visto en los entrenamientos de pretemporada, la gran igualdad existente entre todas las mecánicas que participan en el campeonato.
Ducati siempre está arriba, como también Yamaha, quizás la que menos ha evolucionado este invierno, pero es que tanto Repsol Honda como Suzuki han dado un claro paso adelante para ponerse al nivel de su competencia y, en el caso de la italiana Aprilia, no ha sido uno sino varios pasos los que ha dado en este invierno.
El fabricante de Noale no era un habitual en la pelea por las mejores posiciones de carrera salvo en contadas excepciones y debido a las favorables condiciones de algún determinado circuito, pero es que tanto en los entrenamientos de Losail como en los de Mandalika, los catalanes Aleix Espargaró y Maverick Viñales han demostrado un rendimiento y potencial prácticamente del nivel de sus competidores, lo que al menos hasta que comience en campeonato les permite estar en todas las "cábalas".
Aleix Espargaró es la figura siempre "en ciernes" y a punto de explotar en su rendimiento, algo que podría hacer en este 2022, mientras que de Maverick Viñales, tras su polémica salida de Yamaha y su inesperado fichaje por Aprilia, es el piloto del que se espera "todo".
En esa misma tesitura se encuentran los pilotos del Repsol Honda, Marc Márquez y Pol Espargaró, sobre todo después de todo lo visto en los entrenamientos previos, pero es lo mismo que se espera también de los dos oficiales de Ducati, el italiano Francesco "Pecco" Bagnaia y el australiano Jack Miller.
Si en 2021 debían de ser referentes por el título conseguido por Joan Mir en 2020, los pilotos de Suzuki, él y Alex Rins, se diluyeron a lo largo del año por la inexistente evolución de su prototipo de GSX RR, algo que esta vez sí parecen haber solucionado los ingenieros nipones y que, salvo error, podría devolverles a la lucha por el podio de manera habitual en 2022.
El caso de KTM parece el más preocupante de todos ellos pues durante la pretemporada ni el surafricano Brad Binder ni el portugués Miguel Oliveira han estado demasiado "brillantes" y sus dos debutantes del equipo satélite, el madrileño Raúl Fernández y el australiano Remy Gardner, que dieron claras muestras de estar aún "muy verdes" para la categoría reina del mundial de motociclismo.
Su piloto probador, el barcelonés Daniel Pedrosa, tiene un largo e intenso camino por delante para intentar lograr la competitividad y nivel mostrado por sus rivales en los entrenamientos de pretemporada.
Una vez más el fabricante de Borgo Panigale será quien más representantes tenga en pista ya que a sus oficiales Bagnaia y Miller se unen los "casi" oficiales Jorge Martín y Johann Zarco, el madrileño y el francés que militan en la escudería Pramac, además de la "Armada" italiana formada por Luca Marini y Marco Bezzecchi en el nuevo equipo VR46, propiedad de Valentino Rossi pero dirigido por el matriense Pablo Nieto, y Enea "La Bestia" Bastianini y Fabio di Giannantonio, en el equipo Gresini Racing, hasta finales de 2021 la escudería en la que la marca Aprilia disputó el campeonato del mundo, antes de pasar a ser oficialmente equipo de fábrica.
Honda contará una temporada más con el cervariense Alex Márquez y el japonés Takaaki Nakagami, en el equipo satélite del italiano Lucio Cecchinello; Yamaha tendrá en su escuadra malasia al veterano italiano Andrea Dovizioso y al debutante surafricano Darryn Binder, y KTM contará con los ya citados Raúl Fernández y Remy Gardner en la escudería satélite francesa que dirige Hervé Poncharal.