Patético y casposo dúo de cantamañanas que se resiste a comprender que hace un buen rato que se les pasó el cuarto de gloria: De verdad que, ahora que ya no les contratan no para bolos del pueblo más recóndito, da más pena que risa verlos vestidos de los adolescentes que fueron hace una eternidad, mendigando unas migajas de atención. Y qué leñe, que han conseguido su objetivo al proclamar que actuarían en un concierto promovido por católicos o en otro alentado por el colectivo LGTBI, pero jamás si fueran convocados por Bildu porque “son etarras y han matado gente”. Se imagina uno el tremendo disgusto de Arnaldo Otegi, que ya los tenía agendados para el mitin de inicio de campaña del 28-M. Menudo par de memos sin sustancia.