Definitivamente, la moción de censura de Vox con Ramón Tamames como candidato tiene muy revuelto el gallinero diestro. Y hasta un tanto dividido. Como ya vimos (y seguiremos viendo), la mayoría de los amanuenses hiperventilan porque ven en el esperpento un regalo a Sánchez. Pero también empiezan a aparecer los que aplauden la ocurrencia.

"Lo bueno de Tamames es que va a hacer de Sánchez un soneto de Quevedo"

José F. Peláez (ABC)

En cabeza de los partidarios, José F. Peláez, que glosa así en ABC al aspirante: “Estoy convencido de que va a ser la mejor intervención parlamentaria que vamos a escuchar en España en los últimos veinte años. No lo tiene difícil, vale, pero es que presiento que va a ser algo antológico, un toque de atención histórico a la izquierda tontita por parte de la izquierda seria, que estaba igual de equivocada, pero que, al menos, había leído. Y que a gente como Patxi le habrían puesto a llevar los cafés. Lo bueno de Patxi es que ha hecho de Héctor Gómez un pensador. Y lo bueno de Tamames es que va a hacer de Sánchez un soneto de Quevedo”. Que Santa Lucía conserve la vista a Peláez. Ni seria ni no seria. Tamames no es izquierda.

El columnero de Libertad Digital Pedro de Tena también rompe una lanza a favor de la peculiar iniciativa: “Creo que la moción de censura anunciada por Vox con la candidatura de Ramón Tamames a la presidencia del gobierno como ariete es muy oportuna y responsable (porque responde a la tarea de un partido de la oposición) y, aunque finalmente será difícil que tenga refrendo parlamentario, va a tener un reconocimiento social, político y mediático de considerables proporciones. Y así será a pesar de los que ven en ella un tiro en el pie, una payasada, una incomodidad o un peligro cierto”.

No faltan los entreverados, los del sí pero no, no pero sí, como Santiago González (El Mundo): “Ya tenemos planteada una moción de censura que me plantea algunas dudas. No por la edad, sino por el tiempo, faltan tres meses para unas elecciones que pueden ser decisivas. Cabe esperar toda suerte de perrerías: que la sumisa Batet convoque el pleno en el mismo mayo, la práctica del filibusterismo para agotar al candidato, la indulgencia envenenada. En fin, no me provoca entusiasmo, pero en un régimen que tiene como presidente a Pedro Sánchez y que tuvo a Pablo Iglesias como vicepresidente, me parecería razonable hasta resolverlo por sorteo”.

"Sánchez recuperará resuello durante un buen puñado de horas, pero la soga de la que cuelga no dejará de tensarse bajo el puente Blackfriar de su conducta delicuencial"

Jesús Cacho (Vozpópuli)

Entrando ya en la zona tibia tirando a fría, Jesús Cacho glosa en Vozpópuli la figura de Tamames como si fuera el mayor de los estadistas, pero acaba cantando la gallina: “Todo puede pasar en algo que tiene más de esperpento valleinclanesco que de operación de acoso y derribo a un tipo dispuesto a acabar con la España de ciudadanos libres e iguales. Las mociones, como las elecciones, las carga el diablo. Ello en el convencimiento de que pase lo que pase, apenas quedará del episodio el eco lejano de unas risas sobre la faz aterida de una España que no está para bromas. Sánchez recuperará resuello durante un buen puñado de horas, pero la soga de la que cuelga no dejará de tensarse bajo el puente Blackfriar de su conducta delicuencial”.

En El Debate, Antonio R. Naranjo hace también sus equilibrios, aunque queda claro que esta vez no está con los suyos. “El cuerpo pide respaldar esta moción de censura, para retratar a un presidente nefasto que será un peligro público sin precedentes si logra reeditar su Gobierno tras las próximas Elecciones. Pero la cabeza dicta otra cosa: cuando el rival se está equivocando, y este Gobierno es un equívoco al completo, conviene no distraerle. Y esto, desgraciadamente, le da un balón de oxígeno impagable. Quizá porque el objetivo real de la moción no es Sánchez, aunque lo parezca formalmente, sino Feijóo”.

"Contra Sánchez no vale todo y menos pegarse tiros en el pie. Esta moción huele a pólvora pero no precisamente en La Moncloa"

Carmen Mtnez de Castro (El Debate)

También en el digital ultracatólico, la antigua jefa de prensa de Mariano Rajoy, Carmen Martínez de Castro echa mano en el título del clásico “Tiro en el pie” para una pieza en la que no hay lugar a dudas: “Quienes acuñaron con éxito el concepto de «la derechita cobarde» han decidido esconderse ellos y sus planteamientos ideológicos detrás de un simpático zascandil de la política como es Ramón Tamames, al que han rescatado del olvido a su provecta edad. Contra Sánchez no vale todo y menos pegarse tiros en el pie. Esta moción huele a pólvora pero no precisamente en La Moncloa”. Ni en sus sueños más lúbricos podía esperar Ramón Tamames que se iba a hablar tanto de él. Y lo que queda.