En octubre de 2022 Xabi Alonso daba la noticia: se mudaba a Alemania. El motivo sonó a bombo y platillo en todos los medios, ya que el tolosarra había fichado como entrenador del Bayer Leverkusen. Por delante un objetivo que en aquel momento parecía inalcanzable y en el que muy pocos confiaban: ganar su primera Bundesliga y romper con la eterna hegemonía del Bayern de Múnich.
El momento no era el mejor, ya que el equipo arrastraba una mala racha de resultados, algo que no amilanó a Alonso. Él y su familia hicieron las maletas directos a Alemania y, como entrenador, se puso manos a la obra. Han sido dos años de trabajo, de formar equipo, de dar confianza a los jugadores hasta que el pasado domingo, 14 de abril de 2024, protagonizó una histórica goleada contra el Werder Bremen.
Por cosas como esas, el exfutbolista vasco se ha convertido en uno de los entrenadores europeos más destacados… y deseados. Pero el triunfo no es una sensación nueva para Xabi Alonso, ya que el palmarés de este exfutbolista es literalmente apabullante. Solo durante los once años que estuvo con la selección española acumuló 114 internacionalidades y 16 goles. Con ella se proclamó doble campeón de Europa, en 2008 y 2012, y campeón del mundo en 2010.
Una carrera futbolística de éxitos
Formado en las categorías inferiores de Antiguoko y Real Sociedad, debutó en Primera División con el conjunto donostiarra a mediados de la temporada 2000-01, tras ser repescado de su cesión en la Sociedad Deportiva Eibar.
Permaneció en San Sebastián cuatro temporadas y en 2004 fue traspasado al Liverpool Football Club de Rafa Benítez. En la primera de sus cinco temporadas con el club de Anfield, se proclamó campeón de Europa, tras la épica final de Estambul de 2005.
En 2009 regresó a España para fichar por el Real Madrid Club de Fútbol y ganó una Liga, dos Copas (2011 y 2014), una Supercopa y su segunda Liga de Campeones, la Décima para el club. Tras cinco temporadas en Madrid, fichó en 2014 por el Bayern Múnich dirigido por Pep Guardiola. Permaneció tres años en el club bávaro, hasta su retirada al final de la temporada 2016-17. Había cumplido 18 años como profesional.
La pasión por el fútbol a Xabi Alonso le venía desde la cuna, ya que hay que recordar que es hijo de Periko Alonso. Sus otros dos hermanos también han estado vinculados al mundo del balompié: uno como futbolista y otro como árbitro.
Lo primero, la familia
Pero, a pesar de la importancia que siempre ha tenido y tiene este deporte en su vida, el de Tolosa ha asegurado (y demostrado) que lo más importante en su vida es su familia. Algo que quedó patente cuando, hace casi dos años, su mujer, Nagore Aramburu, y sus tres hijos, Jon, Ane y Emma, no dudaron ni un momento en trasladarse con él a Alemania para vivir en familia sus nuevos retos profesionales como entrenador.
Un vistazo rápido a sus redes sociales deja claro el papel que juega su familia en su día a día. Jon, de 16 años, como su padre, juega al fútbol y lo hace también con el número 14. Su madre es su mayor fan y no duda en acompañarle a los torneos que juega, como mostró hace unas semanas en redes sociales junto al mensaje, “estos días de torneos de fútbol y en los lugares que nos llevan sean una oportunidad para reforzar vínculos y crear recuerdos imborrables”.
De momento, parece que la familia se queda donde está ya que, aunque durante un tiempo corrieron los rumores de que Alonso se haría cargo del Bayern al final de la temporada, o que intentaría ocupar el puesto de Jürgen Klopp en Anfield, parece asegurado que defenderá el título de campeón con el Leverkusen después de anunciar su permanencia en el club.
Nagore Aramburu, la mujer de su vida
En su perfil de Instagram (donde cuenta con 110.000 seguidores), Nagore Aramburu, nacida en 1979 en Azpeitia, se define como modelo y creadora de contenido. Ella es la piedra angular en la vida de Xabi Alonso, y junto a él ha vivido en Eibar, Liverpool, Madrid, Múnich, San Sebastián, y ahora Düsseldorf. Ella es amante de la moda, la buena gastronomía y pintora ocasional, y conoce a Xabi de toda la vida. Se casaron el 11 de julio de 2009 en una preciosa e íntima boda celebrada en la iglesia donostiarra de Zorroaga, donde se pudo disfrutar de la música del Orfeón Donostiarra y del grupo Arkaitz.
La novia lució para la ocasión un precioso vestido de la diseñadora vasca Isabel Zapardiez, de línea sirena, con encaje y cola, y completaba su look nupcial con un velo tipo mantilla. Con los novios iba Jon, el primogénito de la pareja que entonces apenas era un bebé.
Imagen de jugador serio
Lejos de las excentricidades que caracterizan a muchos de sus compañeros de exprofesión, la carrera, la vida y la imagen de Xabi Alonso siempre han destacado por la seriedad, la profesionalidad y la discreción. Sin duda, el hecho de que se casara con su novia de juventud y que hayan creado una familia estable y unida ha contribuido a eso. En cuanto a sus estilismos, lejos de los excesos del mundo del fútbol, Xabi Alonso siempre ha mostrado una imagen impecable. Él mismo admite, sin problemas, que eso es cosa de Nagore, que es en parte responsable de sus creaciones estilísticas.
“Ella tiene un excelente estilo. Confío en que tiene un buen olfato para las cosas. Así que cuando me dice algo, tomo su consejo”. Con una clara influencia británica, que se pudo fraguar en sus años en Liverpool, Alonso tiene un estilo en el que no abundan los logos (algo que parece tener hipnotizados a sus compañeros de profesión), le suele sumar un toque deportivo y lo que ahora se llama lujo silencioso. Una imagen que le ha servido para ser imagen de marcas de moda como Hugo Boss.
Defendió su inocencia sin pactar con Hacienda
Solo hay una ocasión en la que el guipuzcoano ocupó titulares fuera de la sección de deportes de los medios de comunicación. Y fue muy a su pesar. Ocurrió cuando el fisco le acusó de cometer diferentes delitos contra la hacienda pública. A nadie le extrañó que saltara su nombre, acostumbrados como estamos a que los nombres de los deportistas aparezcan demasiadas veces en este tipo de listas (llamativas por la importancia de los nombres y por las cantidades astronómicas de dinero) pero a todo el mundo le sorprendió la reacción de Alonso.
Lejos de llegar a un pacto con el fisco español como han hecho muchas caras conocidas acusadas de fraude al erario público, Xabi Alonso fue la nota discordante al decidir ir a juicio para defender su inocencia. Concretamente se le acusaba de tres delitos contra la Hacienda Pública en 2010, 2011 y 2012 con la Fiscalía pidiendo varios años de prisión para él por también ceder sus derechos de imagen a una empresa radicada en la isla de Madeira. Eso suponía, nada más y nada menos, que la comisión de tres delitos fiscales de los que fue absuelto. Seguro de su inocencia, plantó cara con su equipo de abogados y una a una fue absuelto de todo: en la Audiencia Provincial de Madrid, el Tribunal Superior de Justicia de esta comunidad y el Tribunal Supremo.