La red sociocultural Bizan, integrada por 16 centros repartidos por los distintos barrios de la ciudad, articula una programación estable de actividades, servicios y propuestas comunitarias dirigidas a personas mayores de 60 años en Vitoria. Los servicios se desarrollan de forma continuada a lo largo del año. Su funcionamiento se apoya en un modelo organizativo en el que las propias personas usuarias participan de manera directa en la planificación de buena parte de la oferta.
Uno de los elementos centrales de este modelo son las comisiones de actividades, órganos de participación presentes en cada centro y compuestos por personas usuarias con el acompañamiento del personal técnico municipal. A través de estas comisiones se diseñan, organizan y evalúan numerosas iniciativas que conforman la programación mensual de Bizan. En conjunto, la red desarrolla en torno a 250 actividades cada mes, una cifra que da cuenta del volumen y la diversidad de propuestas que se gestionan desde los centros.
Lidia Estévez y Marisa Martínez de Rituerto son dos de las personas que participan activamente en estas comisiones. Estévez es usuaria del centro Bizan de Txagorritxu y Martínez de Rituerto forma parte del centro de Aranbizkarra. Ambas explican que las comisiones se reúnen de forma ordinaria una vez al mes y que cada una se centra en un ámbito concreto de la programación. Existen comisiones vinculadas a excursiones, salud, lectura, artes escénicas, educación, audiovisuales, actividades recreativas o propuestas comunitarias, en función de las características y demandas de cada centro.
Estévez ha formado parte de la comisión de excursiones, desde donde se planifican salidas de día o visitas culturales dentro y fuera del territorio. “Hace poco fuimos a pasar el día a Bilbao. El autobús y la comida los reservamos para que fueran asequibles para todos. Luego fuimos a dar un paseo y nos lo pasamos muy bien”, relata. Estas comisiones trabajan con un presupuesto anual asignado, que se gestiona en función de las actividades previstas y de los criterios establecidos por la red Bizan. Para su constitución se requiere un mínimo de tres personas, lo que facilita la rotación y la incorporación de nuevos participantes.
“Muchas veces me encuentro con gente mayor que está sola, yo les animo a unirse porque en los Bizan van a encontrar acompañamiento”
Martínez de Rituerto subraya el papel organizativo de estos grupos dentro del funcionamiento cotidiano de los centros. “Para mí es una motivación juntarnos y organizar cosas”, señala, y apunta a la necesidad de seguir reforzando este sistema para garantizar su continuidad: “Los centros Bizan están en un momento dulce, pero hay que seguir fomentando la participación de la gente mayor para que seamos muchos más”.
Actividades y servicios
La programación de Bizan se estructura a partir de dos grandes bloques: las actividades impulsadas por las comisiones y los talleres y cursos de carácter más estable, que se ofertan por trimestres o cursos completos. Entre las actividades habituales se encuentran charlas y conferencias, clubes de lectura, talleres de escritura, cinefórum, cursos de informática y uso de dispositivos móviles, actividades de memoria, idiomas, manualidades, música o artes escénicas.
Estévez explica que los centros Bizan ofrecen un programa que combina todo tipo de actividades, dirigidos a cuidarse, mantenerse en forma, aprender y compartir momentos en comunidad: “Yo animo a todo el mundo a unirse a los centros Bizan, porque tienen actividades para todos los gustos y necesidades”.
La red cuenta también con una oferta regular de actividad física adaptada, que incluye gimnasia suave, yoga, pilates, taichí o paseos saludables, en coordinación con los programas municipales de promoción de la salud. Estas actividades se desarrollan tanto en los propios centros Bizan como en espacios públicos del barrio, en función de la propuesta.
“Los centros Bizan están en un momento dulce, pero hay que seguir fomentando la participación de la gente mayor para que seamos muchos más”
Además, Bizan impulsa actividades intergeneracionales y abiertas a la ciudadanía, como exposiciones, representaciones teatrales, encuentros con asociaciones vecinales o colaboraciones con centros educativos y culturales. Estévez explica que este tipo de iniciativas buscan integrar la programación de los centros en la vida cultural del barrio y facilitar la relación con otros colectivos: “Muchas veces me encuentro con gente mayor del barrio que está sola, yo les animo a unirse porque en los Bizan van a encontrar acompañamiento”. Martínez de Rituerto, por su parte, valora positivamente la variedad de opciones que ofrece la red: “Hemos estado visitando la ikastola de nuestro barrio y la verdad es que compartir un rato con los pequeños ha sido muy divertido”.
Junto a la programación sociocultural, la red Bizan ofrece distintos servicios de apoyo. Algunos centros disponen de comedor para personas mayores, un servicio municipal orientado a facilitar menús equilibrados y a ofrecer un espacio de uso cotidiano. La red cuenta también con Bizan Info, una oficina central de información desde la que se atienden consultas sobre inscripciones, actividades, funcionamiento de los centros y otros recursos municipales dirigidos a las personas mayores.
Además, en enero el Servicio municipal de Personas Mayores estrenará un grupo de encuentro para mayores de 55 años LGTBIQ+ con el objetivo de tener en cuenta la diversidad sexual a la hora de organizar una actividad, siempre con el objetivo de que quienes participan se sientan a gusto y en un espacio de acogida.
El grupo de encuentro se citará los terceros lunes de cada mes en la oficina de Bizan Info, ubicada en el Parque de la Florida. La idea es empezar a reunirse el próximo 19 de enero en horario de 18.00 a 20:00 horas.