Ir a mesa puesta suele ser la queja habitual de muchas amatxus en Navidad ante su prole, al ver que son ellas las que, en general, tiran del carro, a la hora de ir al mercado a comprar los manjares de estas fechas, las que los cocinan e incluso las que pagan los menús de estas fechas.
Pero hay una cosa que, sobre todo, no tiene precio: la del tiempo que invierten en todo este proceso, mientras el resto de la familia no se ‘come’ la cabeza ni con las recetas a elegir o mientras disfrutan a gusto del tradicional pintxo-pote de Nochebuena sin tener que mirar al reloj para ver si se les pasa la hora de poner el horno o empezar a hacer los entrantes. Es por eso que cada vez es más habitual en Álava recurrir a platos y menús navideños preparados para que sean otros los que cocinen por ellas.
Así lo han notado en Sukaldea Abastos, tal y como resalta Rocío Orbea, donde ya les están haciendo pedidos, “sobre todo, asados, como cordero y cochinillo”.
El asado de cochinillo “entero está a 140 euros y la mitad, a unos 70”. Y el de cordero, que va a peso, ronda los 26,90 euros.
“Luego nos piden bastante pimientos rellenos, como de entrantes, los txipirones en su tinta y el bacalao al pil-pil”.
“Lo que es en Navidad, cada vez más gente se anima a hacer pedidos para comerlos en su casa, porque no quieren cocinar en sus casas. Es más, nos dicen también de llevarlo, pero en estas fechas no podemos”, precisa.
Con postre
Aparte de platos preparados, también tienen gran demanda sus menús especiales para Nochebuena o Nochevieja, “que los compran un montón”, por 29 euros.
El aperitivo, de ponche navideño, no se puede cambiar, “pero luego tienen que elegir entre uno de los dos primeros y entre uno de los dos segundos. Incluye el postre de tronco de Navidad”.
Para el menú del 24, el último día que hay de plazo para hacer encargos es hasta el 19 o 20 “más o menos”. Y para el de Nochevieja, “unos cinco días antes”, aclara Orbea.
Perfil
En cuanto al perfil de la persona que realiza los pedidos en su local de Abastos para estas fechas, suelen ser mayor: “Abuelitos, señoras... ya que los jovencitos no suelen venir a pedir porque se suelen encargar las madres de estas cosas, pero durante el resto del año, en cambio, sí que vienen ellos”.
