El pasado 25 de junio, la asociación Ciclistas Urbanos de Vitoria, conocida como Bizikleteroak, puso sobre la mesa una propuesta ciudadana que contempla la creación de una vía ciclista separada y segura en el tramo compartido actualmente con el tranvía. Y es que, en muchas ocasiones, y sobre todo en los tramos céntricos, los ciclistas circulan por los raíles de este transporte público porque “no existe infraestructura ciclista específica”.
“Al liberar uno de los carriles actualmente destinados al tranvía, se puede ampliar significativamente el espacio para peatones y ciclistas, fomentando una movilidad más sostenible y segura"
Concretamente, marcan el “eje este-oeste, entre el Casco Medieval y las vías del tren” como zona “conveniente” para acondicionar un mayor espacio peatonal y una vía ciclista específica “a costa de suprimir una de las vías del tranvía, de manera que pase a ser un tramo de una sola vía para los dos sentidos de circulación”.
“Al liberar uno de los carriles actualmente destinados al tranvía, se puede ampliar significativamente el espacio para peatones y ciclistas, fomentando una movilidad más sostenible y segura. Por lo que la ampliación de aceras y la creación de un carril bici continuo contribuirá a una mejor convivencia entre peatones y ciclistas”, sostienen desde la asociación local.
Vía ciclista
Las motivaciones para querer impulsar esta petición son varias. En primer lugar, señalan que el Ayuntamiento de Vitoria “contabiliza como vía ciclista y así lo marca en el mapa de la red ciclista, 780 metros compartidos con el tranvía”.
"No puede ser considerado ni contabilizado como vía ciclista ya que es un espacio no está acondicionado para el tráfico de ciclos"
Algo que la entidad corrige porque el espacio compartido con el tranvía “no puede ser considerado ni contabilizado como vía ciclista ya que es un espacio no está acondicionado para el tráfico de ciclos, no tiene señalización horizontal ni vertical correspondiente y no permite el paso seguro de las bicis”.
Por otro lado, resaltan también la estrechez de las zonas peatonales en ese mismo eje de Gasteiz, mientras que “el tramo considerado como vía ciclista, espacio compartido con el tranvía” cuenta con “doble vía”.
Seguridad para ciclistas y peatones
Además, desde Bizikleteroak recuerdan que, según lo recogido en el Plan Plan de Movilidad Sostenible y Espacio público 2021-2025, “el transporte público, junto con los desplazamientos a pie y en bicicleta, permiten que la población pueda desplazarse sin necesidad de utilizar el vehículo privado, en unos tiempos razonables y en condiciones adecuadas de uso y acceso a la red”.
Sin embargo, matizan que “el transporte público sólo puede considerarse una movilidad sostenible si se integra de manera segura con otras opciones de transporte, particularmente aquellas que aportan beneficios sociales y ambientales mayores, es decir, caminar y andar en bicicleta.
Aseguran que los ayuntamientos y administraciones están “obligados” a que las líneas de tranvía se diseñen y construyan de forma que ciclistas y peatones “no se vean perjudicados”.