"Bajas por ansiedad, suspensiones de trabajo y sueldo durante dos días por bajarnos un momento la mascarilla, cambios de turno sin avisar, 'errores' en las nóminas, cámaras de vigilancia en los puestos de trabajo... La lista es larga".

Es la grave situación laboral que, tal y como denuncia el comité, atraviesa desde hace unos años la plantilla de una empresa de Vitoria.

Problemas que arrastran desde 2018, cuando un grupo catalán adquirió esta empresa familiar de Gamarra con más de 150 años de historia, "con un cambio organizativo interno que ha sido brutal".

El comité ha denunciado ante Inspección de Trabajo que "la empresa llama sin parar a los trabajadores a sus teléfonos personales cuando están de baja para coaccionar, presionar y que vuelvan cuanto antes".

Una situación de "amenazas y miedo que provoca cada vez más situaciones de estrés y ansiedad en la plantilla", explican los delegados sindicales y trabajadores afectados de la fundición Gamarra.

El comité ha denunciado ante Inspección que "la empresa llama sin parar a los trabajadores a sus teléfonos personales cuando están de baja para coaccionar, presionar y que vuelvan cuanto antes"

Empleados que también "reciben llamadas fuera del horario laboral sin derecho a la desconexión", tal y como apuntan desde ELA.

Ocho horas de trabajo en una fundición no es como estar delante de un ordenador precisamente. Un trabajo físicamente duro, con peso, altas temperaturas y donde trabajan con EPIs y mascarillas. Y donde hay accidentes de trabajo.

Ubicada en Portal de Bergara y con una plantilla de unos 90 trabajadores, la denuncia del comité va más allá porque "cuando hay un accidente de trabajo, la empresa no proporciona el parte de asistencia a la mutua, y se tramita como baja común".

Un detective privado

Una empresa de Vitoria que ha dado un paso más. Tal y como denuncia el comité, "han puesto un detective privado a un compañero estando de baja y le han despedido", algo que el comité considera totalmente "inaceptable y una práctica para meter miedo al resto".

El propio trabajador afectado cuenta que al parecer "el detective le siguió al gimnasio donde hace deporte habitualmente y le grabó en el interior de las instalaciones".

"Han puesto un detective privado a un compañero estando de baja y le han despedido, es totalmente inaceptable y una práctica para meter miedo al resto"

"Estando de baja, claro que puedes hacer deporte, los propios médicos te lo recomiendan según el motivo de la baja", explica el propio afectado.

De hecho, la práctica deportiva no está expresamente prohibida durante una baja laboral, si no agrava la lesión por la que se ha solicitado la ausencia del trabajo.

Evidentemente, se descarta toda actividad física incompatible con una lesión. Pero el deporte puede ser beneficioso e incluso recomendable por los sanitarios en las bajas.