Euskadi supera las 1.000 empresas emergentes, con más de 8.000 personas empleadas, y una tasa de supervivencia, es decir, que siguen activas, superior al 80%.

Las cifras se han facilitado durante la cuarta reunión del Consejo Asesor Vasco del Emprendimiento, presidido por la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia.

En el encuentro se ha revisado el primer informe sobre el estado de situación del Ecosistema Vasco de Emprendimiento, según el cual la valoración estimada del conjunto de las 'start-up' (empresas emergentes) vascas supera los 1.500 millones de euros.

Se trata de un ecosistema muy ligado a su tejido productivo, donde 7 de cada 10 empresas emergentes desarrollan soluciones dirigidas a los sectores estratégicos de Euskadi.

Respecto a la inversión en estas empresas, hay un notable crecimiento en el número de fondos activos en el territorio, con más de 130 inversores, tanto público como privados.

A ello se suma un crecimiento sostenido en el número de rondas de inversión y en el importe total de esas rondas durante los últimos años.

Así, en los 2 últimos años se han movilizado más de 198 millones de euros en 300 rondas de inversión, 70% procedente de fondos de inversión regionales/estatales y un 30% procede de fondos de inversión europeos.