Muchos ciudadanos, cuando se jubilan a los 65 años de edad, tienen una duda importante: cuánto dinero cobrarán de pensión. Cabe mencionar que es una cuestión que está sujeta a muchos factores, entre los que destacan, principalmente, la base reguladora, los años de cotización y el tipo de jubilación (anticipada, ordinaria o diferida).

Por lo tanto, y centrándonos en las prestaciones que se perciben en el conjunto de Euskadi, existe una duda: ¿cuál es la provincia donde son más altas? Para ello, hay que ahondar en la tipología de cada pensión, así como en los condicionantes que afectan a todas ellas. 

Estructura y condiciones 

El sistema de pensiones se divide en contributivas (jubilación, incapacidad permanente, orfandad y viudedad) y no contributivas. La primera se dirige a quien ha cotizado al menos 15 años a la Seguridad Social, mientras que la segunda es para quien no ha contribuido ese periodo mínimo. 

Para acceder a una pensión de jubilación, es imprescindible cotizar un mínimo de 15 años a la Seguridad Social. Actualmente, se deben cotizar 37 años cotizados y 6 meses para cobrar la jubilación completa. 

En cuanto a la edad de jubilación ordinaria, hoy en día queda fijada en los 66 años y 4 meses, si bien puede variar dependiendo de la persona y su vida laboral, al igual que otros criterios personales.

Varios jubilados conversan en la calle. EP

Las pensiones en Euskadi 

Según el Ministerio de Empleo y la Seguridad Social, la pensión media en el Estado es de 1.254,62 euros a junio de 2024, teniendo en cuenta la jubilación, la incapacidad permanente, la orfandad, la viudedad y el favor de familiares.

Si lo desglosamos por comunidades autónomas, en Euskadi se reciben, de media, 1.551,30 euros, una cifra más elevada que en el resto de territorios.

Por provincias

Álava es la provincia donde más se cobra, con 1.574,47 euros de media mensuales. Después tenemos Bizkaia, donde la jubilación es de 1.563,44 euros al mes, y luego queda Gipuzkoa, donde los pensionistas perciben 1.522,56 euros cada mes. 

A nivel de Estado

La pensión media en el total del Estado es de 1.254, 34 euros mensuales. Después de Euskadi, las comunidades autónomas con jubilaciones más elevadas son Asturias (1.465,87 euros), la Comunidad de Madrid (1,458,37 euros), y Navarra (1.438,16).

En el otro extremo, las prestaciones más bajas se hallan en las siguientes comunidades autónomas: Andalucía (1.122 euros), Región de Murcia (1.113 euros), Galicia (1.074 euros) y Extremadura (1.053 euros).

Historia del sistema de pensiones

El sistema de pensiones ha evolucionado desde sus inicios en el siglo XIX. A día de hoy, es uno de los pilares básicos del estado del bienestar y que busca recompensar el trabajo de toda una vida laboral con prestaciones dignas para afrontar la tercera edad con garantías. 

Sus inicios

En 1883, se establecieron las primeras bases de protección social con la creación de la Comisión de Reformas Sociales, que buscaba mejorar las condiciones laborales. En 1908, se fundó el Instituto Nacional de Previsión (INP), que introdujo el Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez (SOVI). En 1947, se proporcionaban pensiones a los trabajadores mayores de 65 años.

Tras la dictadura

Con la llegada de la democracia, se produjo una reforma en 1978 con la promulgación de la Constitución, que consagró el derecho a una pensión suficiente. En 1985, la Ley de Pensiones estableció un sistema basado en la el factor contributivo, el cual vincula la cuantía de la pensión a las cotizaciones realizadas durante la vida laboral.

En el siglo XXI 

El sistema actual se estructura en tres pilares. El primero es el público, gestionado por la Seguridad Social, que incluye pensiones de jubilación, viudedad, orfandad e incapacidad permanente. 

El segundo pilar consiste en planes de pensiones de empleo promovidos por las empresas. El tercer pilar se compone de planes de pensiones individuales, voluntarios y privados.

Retos del futuro 

En los últimos años, debido a la creciente esperanza de vida y al envejecimiento de la población, se han llevado a cabo diversas reformas para garantizar la sostenibilidad del sistema. 

Una de ellas es la ampliación de la edad de jubilación a 67 años y el incremento del periodo de cálculo de las pensiones. Estas medidas buscan mantener el equilibrio financiero y asegurar la viabilidad del sistema de pensiones en el futuro.

Una pareja de jubilados pasea por un parque. Freepik